El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, condenó duramente el miércoles el "brutal asalto" del régimen de Assad a la ciudad de Daraa, en el suroeste de Siria, informa la Agencia Anadolu.
Blinken pidió "el fin inmediato de la violencia, que ha matado a civiles y ha desplazado a miles de personas que sufren la escasez de alimentos y medicamentos."
"Reiteramos los llamamientos a un alto el fuego en todo el país en línea con la resolución 2254 del Consejo de Seguridad de la ONU", escribió en Twitter.
El régimen sirio reanudó sus ataques contra Daraa al-Balad tras el fracaso de las conversaciones de mediación dirigidas por Rusia entre el régimen y las fuerzas de la oposición, dijo el martes un grupo local.
Daraa, conocida como la cuna de la revolución siria, alberga a 40.000 residentes y fue un bastión de la oposición hasta 2018.
LEER: Alemania acusa a un médico sirio de crímenes contra la humanidad
El 29 de julio, las fuerzas del régimen y las milicias respaldadas por Irán lanzaron una operación terrestre en el barrio de Daraa al-Balad, desencadenando enfrentamientos que se extendieron por el campo. Quince civiles murieron.
Daraa al-Balad fue bloqueada por las fuerzas del régimen el 25 de junio después de que los residentes, entre los que se encontraban antiguos miembros de la oposición siria, se resistieran a la orden de entregar las armas ligeras y permitir que las fuerzas del régimen registraran las casas.
Según el Centro de Reconciliación y personalidades de la zona, la orden se opuso porque violaba los términos del acuerdo de 2018 mediado por Rusia, según el cual los residentes y los ex miembros de la oposición debían entregar todas las armas pesadas.
El acuerdo permitió el paso seguro de miles de rebeldes y civiles a otras regiones controladas por la oposición, mientras que las fuerzas del régimen respaldadas por Rusia lanzaron un ataque para recuperar Daraa.
El régimen comenzó su acción militar a pesar de haber acordado la semana pasada levantar el bloqueo.