El presidente tunecino Kais Saied no permitirá que el parlamento vuelva a trabajar una vez transcurrido el periodo de 30 días de su suspensión, sino que emitirá nuevas directivas para retrasar su regreso, según anunció ayer el secretario general del Movimiento Popular, Zuhair Maghzaoui.
El 25 de julio, Saied se acogió al artículo 80 de la Constitución para destituir al primer ministro Hicham Mechichi, congelar el trabajo del parlamento durante 30 días, levantar la inmunidad de los ministros y nombrarse a sí mismo jefe del poder ejecutivo hasta la formación de un nuevo gobierno.
El Movimiento Popular es el único bloque parlamentario que ha declarado su apoyo a las medidas de Saied, mientras que los demás bloques las calificaron de "golpe".
"Es extremadamente improbable que el parlamento vuelva en su misma forma", dijo Maghzaoui a Mosaïque FM, añadiendo que Saied planeaba llevar a cabo un "referéndum sobre el sistema".
Maghzaoui señaló que el presidente "acabará con la reforma del parlamento". Insistió en la importancia de "no prolongar este periodo excepcional", señalando que el presidente debe "formar un nuevo gobierno lo antes posible".
El funcionario tunecino dijo que el siguiente paso sería "elecciones anticipadas". "Como movimiento popular, nuestra relación con el presidente Saied no se basa en intereses, sino que el movimiento se prepara para la siguiente etapa como partido en el proceso electoral".
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