Estados Unidos ha presionado al primer ministro israelí, Naftali Bennett, para que no cambie las reglas de enfrentamiento con el movimiento libanés Hezbolá, aliado de Irán, en un momento en que está previsto que se inicie en septiembre una nueva ronda de negociaciones nucleares entre Teherán y las potencias mundiales, informó el diario Asharq Al-Awsat.
El periódico citaba a una fuente diplomática que afirmaba que Israel y Hezbolá han enviado mensajes a la FPNUL en el sentido de que no están interesados en cambiar las reglas de enfrentamiento, tras la presión ejercida por Estados Unidos y Francia sobre ambas partes.
El enfrentamiento en el sur también amenaza al gobierno libanés y aumenta las posibilidades de colapso del país, algo que tanto Washington como París intentan evitar.
Mientras tanto, varios generales del ejército israelí dijeron que esperan un inminente enfrentamiento militar con Líbano.
"Vamos a una guerra regional contra Irán, tenemos que tomar la iniciativa", dijo un ex alto oficial del ejército israelí.
La emisora israelí Kan citó a una fuente que dijo que la situación en el Líbano es preocupante, y que ahora se ha tomado conciencia de que se ha abierto un frente en la frontera.
Por tercer día consecutivo, el ejército israelí elevó el domingo el estado de alerta a lo largo de la frontera con Líbano, a la luz de los recientes acontecimientos en materia de seguridad.
El primer ministro israelí, Naftali Bennett, dijo que desde que el nuevo presidente iraní, Ebrahim Raisi, asumió el cargo, "la agresión iraní se ha intensificado en todos los puntos de Oriente Medio por tierra, aire y mar".
El movimiento libanés Hezbolá dijo haber disparado el viernes cohetes en campo abierto cerca de las posiciones israelíes en la disputada zona de las Granjas de Shebaa, en respuesta a los ataques aéreos israelíes que golpearon un día antes lugares pertenecientes al grupo.