Tras un intercambio de disparos entre el ejército israelí y Hezbolá, el ministro de Defensa israelí, Benny Gantz, anunció el viernes que el ejército israelí no tiene intención de dejar que Hezbolá "juegue" con él, informó The Times of Israel.
Gantz también advirtió que Israel está dispuesto a empeorar la grave situación de Hezbolá y Líbano si no se mantiene la calma en el sur de Israel.
"No tenemos intención de dejar que Hezbolá juegue con nosotros y Hezbolá lo sabe", dijo Gantz al Canal 12 de la televisión israelí. "La situación del Líbano es inestable. Podemos hacerla aún más inestable", añadió.
Según The Times of Israel, Gantz también declaró:
Recomendamos que Hezbolá, el ejército libanés y el gobierno libanés no pongan a prueba al Estado de Israel.
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"No tenemos ningún interés en el Líbano, excepto [en mantener] la seguridad y la tranquilidad", dijo, añadiendo que la tranquilidad será respondida con tranquilidad.
Sobre el ataque con cohetes de la resistencia libanesa, Hezbolá dijo en un comunicado: "La resistencia islámica bombardeó zonas abiertas cerca de las granjas de Shebaa con docenas de cohetes de 122 mm".
Dijo que estos cohetes se produjeron en respuesta a los ataques israelíes.