El primer ministro designado del Líbano, Najib Mikati, desmintió las informaciones de los medios de comunicación que afirmaban que tenía la intención de viajar a un país árabe para explorar las perspectivas de la próxima etapa.
"El primer ministro designado, Najib Mikati, desmiente las noticias que han circulado recientemente sobre su intención de viajar a uno de los países árabes para explorar las perspectivas de la próxima etapa, tras lo cual tomará su decisión final", dijo ayer la oficina de prensa de Mikati en un comunicado.
"El primer ministro designado afirma que tales noticias son totalmente infundadas y que se queda en el Líbano y continúa con sus esfuerzos para formar un gobierno", añadió el comunicado.
El 26 de julio, Mikati fue designado para formar el nuevo gobierno tras recibir 72 votos durante las consultas parlamentarias dirigidas por el presidente Michel Aoun.
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Sin embargo, desde su asignación, las consultas entre Mikati y Aoun no han dado resultados y no se ha anunciado un nuevo gabinete.
Los políticos libaneses no han logrado ponerse de acuerdo sobre el gobierno, incluso cuando la moneda ha perdido más del 90% de su valor y más de la mitad de los libaneses han caído en la pobreza.
El Banco Mundial dice que es uno de los peores colapsos jamás registrados. Entre sus causas profundas se encuentran décadas de corrupción en el gobierno y la forma insostenible de financiación del Estado.
Líbano, una larga historia de desastres y crisis - Caricatura [Sabaaneh/MonitordeOriente].
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