El presidente tunecino, Kais Saied, acusó a partidos que no nombró de intentar traer mercenarios del extranjero.
Saied dijo en un vídeo publicado en la página de la presidencia: "Seremos fieles a nuestra promesa mientras podamos respirar y nuestro corazón lata. No tenemos miedo a la culpa, y no importa quién intente maniobrar y comprar algunos mercenarios y traerlos del extranjero".
En cuanto a la prohibición de viajar impuesta a una serie de personalidades, Saied reiteró que la decisión "no incluye a muchas personas, sino a aquellas que tenían causas activas en los tribunales y están acusadas de apoderarse de fondos públicos".
El presidente afirmó que las instituciones estatales del país están funcionando con normalidad, "después de que los tunecinos hayan recuperado su confianza en estas instalaciones."
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El presidente justificó el recurso al artículo 80 de la Constitución para congelar el parlamento tras lo que describió como un "peligro inminente, pernicioso y fatal".
El 25 de julio, el presidente tunecino, Kais Saied, invocó el artículo 80 de la Constitución para destituir al primer ministro, Hicham Mechichi, congelar el trabajo del Parlamento durante 30 días, levantar la inmunidad de los ministros y nombrarse a sí mismo jefe del poder ejecutivo hasta la formación de un nuevo gobierno.
Esto se produce después de que estallaran violentas protestas en varias ciudades de Túnez criticando la gestión del gobierno en materia de economía y el coronavirus. Los manifestantes habían pedido la disolución del Parlamento.
La mayoría de los partidos políticos del país tacharon la medida de "golpe contra la Constitución" y los logros de la revolución de 2011.
Saied aún no ha nombrado a un nuevo primer ministro.
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