En una primera reprimenda directa a los talibanes desde que el grupo tomó el control de la capital afgana, Kabul, el mes pasado, Irán calificó el lunes de "preocupante" la evolución de los acontecimientos en el asediado valle de Panjshir, informó la Agencia Anadolu.
En declaraciones a la prensa en Teherán, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Saeed Khatibzadeh, denunció enérgicamente la violencia en el valle del norte de Afganistán, donde murieron dos altos cargos del grupo que resiste a los talibanes.Los combates entre los talibanes y el Frente Nacional de Resistencia (FNR), liderado por Ahmed Massoud, hijo del antiguo comandante antitalibán Ahmed Shah Massoud, tomaron un cariz desagradable el domingo después de que los talibanes hicieran incursiones en el valle.
En los enfrentamientos que se produjeron, el portavoz del NDF, Fahim Dashti, y el general Abdul Wadud Zara, antiguo ayudante de Ahmed Shah Massoud, murieron a manos de los talibanes.
Refiriéndose a ellos como "mártires", Khatibzadeh calificó sus asesinatos de "desafortunados".
LEER: Francia e Irán reanudarán sus relaciones bilaterales
En respuesta a las informaciones sobre la ayuda de Pakistán a los talibanes en su ataque al valle del Hindu Kush, que ha sido tradicionalmente una fortaleza antitalibán, el portavoz dijo que están "investigando" las informaciones sobre la presencia de fuerzas extranjeras en el valle.
"Condenamos cualquier injerencia extranjera en Afganistán", afirmó, y añadió que la cuestión debe resolverse mediante "el diálogo y la mediación de los ancianos afganos".
También criticó el bloqueo impuesto a la provincia de Panjshir, que priva a los civiles afganos de alimentos, agua y electricidad.
Es la primera y más clara reprimenda al grupo militante por parte de Teherán, ya que ambas partes han desarrollado en los últimos años estrechos contactos.
Aunque el nuevo gobierno iraní aún no ha señalado si reconocerá la nueva administración política de Kabul, muchos funcionarios iraníes han pedido en las últimas semanas un traspaso de poder pacífico y la formación de un gobierno inclusivo.
También se ha informado de que los talibanes han invitado a Irán a la ceremonia de toma de posesión del nuevo gobierno, pero Teherán aún no lo ha reconocido oficialmente.