Fabricado en Khan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza, el barco tiene unos 21 metros de eslora y entre 4 y 6 metros de manga. Se espera que esté listo para zarpar dentro de unos meses si se dispone de todas las herramientas necesarias para su finalización.
Financiado por la Fundación Beit Al Khair, el barco ha tenido que superar numerosos obstáculos, entre ellos el actual asedio de Israel, que hace que no siempre se disponga de las materias primas necesarias para su terminación.
Khaled Alwan, el contratista palestino que supervisa el proyecto, dijo que se espera que el barco proporcione ingresos a 15 familias: "Si el barco está terminado, 15 pescadores de diferentes familias trabajarán en él cada año... [les] proporciona una fuente de sustento".
"Al principio dudé en aceptar este proyecto, debido a la falta de capacidades, equipos y grandes máquinas para cortar la madera".
"La madera de eucalipto es esencial para construir el casco del barco, pero su disponibilidad en Gaza era escasa, así que la buscamos hasta conseguir la cantidad necesaria, junto con algunos otros tipos de madera."
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Indicó que el barco también necesita "un generador eléctrico, un motor, redes de pesca, piezas de repuesto y otros equipos". Las autoridades de ocupación israelíes impiden que estos equipos entren en el enclave asediado, explicó.
Los palestinos son capaces de fabricar embarcaciones, explicó, "pero la continuación del bloqueo israelí y sus repercusiones socavan esas oportunidades y privan al sector pesquero de renovarse" Este barco puede seguir siendo una estructura de madera anclada en la orilla del mar si Israel se niega a permitir la entrada de los materiales necesarios en la Franja.
Según la Asociación de Pescadores Palestinos de Gaza, hay unos 4.000 pescadores trabajando en el sector pesquero de Gaza, que cuidan de unos 50.000 dependientes.
La profesión ha sido considerada peligrosa por las organizaciones de derechos debido al acoso de Israel a los pescadores en el mar.
Sólo el año pasado, las fuerzas de ocupación israelíes atacaron a los pescadores palestinos frente a la costa de la Franja de Gaza en al menos 320 ocasiones; la Unión de Comités de Trabajo Agrícola (UAWC) denunció 63 ataques más que el año anterior. Además, Israel cerró la zona de pesca por completo durante 16 días en agosto.