Palestina sigue siendo la cuna de los pueblos libres del mundo. Los palestinos siguen siendo la fuente de inspiración y esperanza para los pueblos árabes oprimidos y cautivos dentro de sus tierras. Los gobernantes tiranos fascistas, nombrados por los colonialistas antes de su partida, siguen en sus tronos. Los colonialistas los vigilan de cerca, para asegurarse de que siguen siendo sus agentes en Oriente Medio, y de que merecen sus puestos de privilegio.

Esto significa que deben ser injustos y humillar al pueblo para ganarse la aprobación de sus amos. Así, el pueblo se vuelve débil, sumiso, obediente, frustrado y cargado de derrotismo.

Los que dicen que no son rivales para los gobernantes y sus ejércitos olvidan que, si hay determinación, tienen el poder de derrocar a los tiranos más fuertes. Lo vimos durante la Primavera Árabe, cuando algunos poderosos dictadores tuvieron que huir. Ellos y sus partidarios en Occidente no esperaban esto, ni siquiera en sus peores pesadillas.

De ahí que fuera necesario que los tiranos colaboraran para volver a infundir miedo al pueblo. Las contrarrevoluciones lograron quebrar la voluntad del pueblo y aplastar su dignidad.

Sin embargo, la llama revolucionaria sigue ardiendo en los corazones de los pueblos de espíritu libre que rechazan la esclavitud y la tiranía, y no aceptan el statu quo. Esto es evidente en las redes sociales en el apoyo mostrado a la resistencia palestina contra la ocupación sionista cada vez que Israel lanza una ofensiva militar. "¡Palestina libre, libre!" se ha convertido en el eslogan que compensa la humillación infligida al pueblo por los déspotas árabes en las capitales de toda la región. En mayo vimos que los grupos de resistencia han establecido nuevas reglas de combate con su capacidad de contraatacar al enemigo. Esto ha reavivado la esperanza en los corazones y las mentes del pueblo árabe.

LEER: ¿Quiere Israel poner fin a sus guerras eternas en Gaza?

Palestina sigue siendo la brújula moral de toda la región. Durante más de 70 años, ha unido a las masas árabes, no sólo por la mezquita de Al-Aqsa, sino también porque es una tierra que sigue bajo ocupación colonial. Los Estados árabes están ocupados indirectamente, por supuesto, pero Palestina es una ocupación abierta.

Sí, algunos palestinos cayeron en la "trampa de la libertad" conocida como los Acuerdos de Oslo y ayudaron a crear una "Autoridad Palestina", cuyo único propósito es proteger al Estado de ocupación de Israel. Su obediente líder es Mahmoud Abbas, para quien la coordinación de la seguridad con los brutales ocupantes es "sagrada".

Sin embargo, la mayoría del pueblo palestino está con la resistencia. Esto fue obvio por la respuesta a la batalla de la "Espada de Jerusalén" en mayo, cuando los palestinos de los territorios ocupados, incluidos los que están dentro del Estado del apartheid, así como en la diáspora, se unieron en apoyo de sus hermanos y hermanas en la Jerusalén ocupada y la Franja de Gaza. Eso tuvo el efecto de un referéndum público sobre la dirección de la AP, y ésta cayó en desgracia. Los territorios palestinos no habían visto tal unidad desde 1938, y eso hizo temblar el suelo bajo los pies de las fuerzas de ocupación, que temen por el futuro de su Estado usurpador.

Lamentablemente, la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) no pudo aprovechar esta circunstancia porque está manchada con la vergüenza de Oslo. No puede ni quiere limpiarse de esta impureza y volver a su propósito y estrategia iniciales como movimiento de liberación nacional que lidera una lucha armada contra la ocupación.

La OLP necesita una reforma seria. Mientras tanto, el pueblo palestino ha elegido el camino de la resistencia para liberar su tierra y ha abandonado toda pretensión del falso "proceso de paz". Así lo demuestran actos individuales de valor, como el del hombre que dio un golpe a los jóvenes de Gaza matando a un francotirador israelí responsable de quién sabe cuántas muertes y heridas que cambiaron su vida. Y el espíritu y la determinación de los seis presos que se fugaron de la prisión de alta seguridad de Gilboa es un ejemplo para toda la región, no sólo para la población de la Palestina ocupada. El hecho de que fueran capaces de cavar un túnel de fuga utilizando una cuchara, sin ser detectados por las sofisticadas medidas de seguridad, fue sorprendente e inspirador. Ni siquiera los avanzados equipos de vigilancia los detuvieron.

LEER: Del "Muro de Hierro" a la "Villa en la Selva", los palestinos derriban los mitos de seguridad de Israel

No importa que cuatro hayan sido recapturados desde entonces, sin duda con la ayuda de espías e informantes dentro de la comunidad palestina. Por supuesto que esperábamos que esto no ocurriera, pero el valor de lo que estos seis cautivos lograron por pura fuerza de voluntad no ha disminuido. El mensaje al mundo expuso los mitos de la invencibilidad sionista, de la misma manera que los cohetes de la resistencia de Gaza han puesto a prueba el legendario sistema de defensa antimisiles Cúpula de Hierro; para gran vergüenza de Israel, fracasó.

La fe y la confianza en sí mismos de los palestinos se han reforzado. Saben que su enemigo no es tan fuerte como el mundo cree; que todas las armas avanzadas del mundo no pueden vencer la verdad y la determinación de un pueblo oprimido. Además, saben que la ocupación no durará para siempre.

Los seis fugados cavaron un túnel para salir de su prisión. A su vez, esto ha abierto túneles a través de los muros de la desesperación y la frustración a través de los cuales el pueblo árabe puede ahora ver la luz, a pesar de los llamados "Acuerdos de Abraham". Es irónico que nos manifestemos a favor de "Liberar a Palestina", porque la evidencia sugiere que son los palestinos los que ya son libres, y somos nosotros los que estamos cautivos del enemigo sionista en nuestras propias tierras.

Las opiniones expresadas en este artículo pertenecen al autor y no reflejan necesariamente la política editorial de Monitor de Oriente.