Estados Unidos no tiene planes de "normalizar o mejorar" las relaciones diplomáticas con el gobierno del presidente sirio Bashar Al-Assad y tampoco alienta a otros a hacerlo, dijo ayer un portavoz del Departamento de Estado.
Los comentarios se produjeron en respuesta a las preguntas de Reuters sobre si Washington estaba alentando y apoyando un acercamiento entre Jordania y Siria después de que Jordania reabriera ayer por completo su principal paso fronterizo con Siria. La medida tenía por objeto impulsar las economías de ambos países, que se encuentran en dificultades, y reforzar el impulso de los Estados árabes para reintegrar a Siria tras haberla rechazado durante su guerra civil.
Funcionarios de Jordania, aliada de Estados Unidos, y del Líbano han instado a Washington a suavizar las sanciones impuestas a Siria. Jordania, Líbano, Siria y Egipto -otro estrecho aliado de EE.UU.- acordaron este mes el envío de gas natural egipcio a Líbano a través de Siria mediante un gasoducto construido hace unos 20 años en un proyecto de cooperación árabe.