El ministro de Asuntos Exteriores de Turquía ha acusado a la administración Biden de no decir la verdad al Congreso y al pueblo estadounidense, al prorrogar la orden ejecutiva de emergencia nacional en Siria.
El jueves, Estados Unidos prorrogó su orden de estado de emergencia -emitida en 2019 cuando Turquía lanzó una operación militar en el norte de Siria- por un año más. En una carta emitida ese día por la administración Biden, que se parecía notablemente a la emitida por la administración Trump hace dos años, afirmaba que la presencia y las actividades militares de Turquía en el norte de Siria suponen una amenaza para la seguridad nacional.
So much buzz on Biden’s Syria authorisation which claims Turkey is posing an extraordinary threat to the US national security
Actually Trump used exactly the same sentence against Turkey in October 2019, when Ankara had another Syria incursion. pic.twitter.com/qSkxPHZbNg
— Ragıp Soylu (@ragipsoylu) October 8, 2021
Mevlut Cavusoglu devolvió el golpe durante una conferencia de prensa conjunta con su homólogo venezolano Félix Plasencia el sábado, afirmando que "En lugar de culpar a Turquía, Estados Unidos debería abandonar sus propias políticas erróneas, y debería ser más honesto con el pueblo estadounidense y su Congreso."
Çavuşoğlu señaló las similitudes de la carta con la de la administración Trump, calificándola de "copy-paste". Dijo que el motivo de la renovación del decreto "es la cooperación de EEUU con la organización terrorista YPG, que EEUU se toma muy en serio."
Desde 2015, Washington ha apoyado, respaldado y armado a las milicias kurdas en Siria, como las Unidades de Protección Popular (YPG) y las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF). Ese apoyo ha enfadado durante mucho tiempo a Ankara, que considera a esas milicias como ramas sirias de la organización designada como terrorista, el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
Sin embargo, Estados Unidos sigue insistiendo en que respalda a las milicias con el fin de combatir a elementos de Daesh dentro de Siria, donde siguen existiendo células dispersas del grupo terrorista.
Sin embargo, Cavusoglu niega esas afirmaciones y subraya que "nosotros [Turquía] sabemos muy bien que el propósito de estar aquí no es luchar contra Daesh... hemos luchado contra Daesh. En la OTAN y en el mundo, el único ejército que está luchando contra él es el nuestro".