Dos ciclistas han batido el récord mundial del mayor dibujo creado por un GPS, escribiendo "Refugees Welcome" para recaudar fondos para una organización benéfica de acogida de refugiados.
Georgie, de Glasgow, y David, de Bournemouth, forman parte de una comunidad de ciclistas llamada Thighs Of Steel, que ha recaudado más de un cuarto de millón de libras para proyectos de refugiados de base, recorriendo miles de kilómetros en bicicleta desde Londres hasta Atenas cada verano desde 2015.
Sin embargo, este año fue diferente.
El nuevo proyecto de ley sobre nacionalidad y fronteras que se está debatiendo en el Parlamento hizo que Georgie y David se pusieran en marcha el 17 de agosto en St Austell (Cornualles), y que se les unieran más de 50 ciclistas para recaudar fondos durante todo el mes que duró el viaje.
La ministra del Interior, Priti Patel, política de los conservadores de derecha que apoyaron el Brexit, y la fuerza impulsora del proyecto de ley, afirma que las reformas tienen como objetivo arreglar el sistema de asilo "roto" del Reino Unido.
El proyecto de ley supondría que cualquier persona que entre en el Reino Unido por una ruta ilegal, como por ejemplo en una pequeña embarcación a través del Canal de la Mancha, podría tener su solicitud declarada como inadmisible, recibir una pena de cárcel de hasta cuatro años, no poder recurrir a los fondos públicos y que sus familiares no puedan reunirse con ellos.
"Nuestro viaje fue en parte una reacción al proyecto de ley de nacionalidad y fronteras de Priti Patel, que se opone directamente a la Convención de Ginebra de 1951. Y para mostrar que realmente no estamos de acuerdo con esto, decidimos hacer una campaña en contra y enviar un mensaje a través de lo que mejor sabemos hacer: ¡el ciclismo!"
"Así que el arte ciclista surgió como una idea natural".
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Los cofundadores de Thighs of Steel, Harri Symes y Oli Kasteel-Hare, concibieron la idea de deletrear las palabras mientras Georgie planificaba la ruta del desafío a través del sur de Inglaterra utilizando la aplicación de navegación Komoot.
Según el organizador, de 27 años, el sur de Inglaterra era el lugar más obvio para planificar el recorrido porque Dover es el puerto de entrada de muchos refugiados.
"La ruta transmite un mensaje muy profundo de compasión y las letras encajan muy bien", dijo.
"Nunca puedes prever realmente cómo será el recorrido hasta que estás en la carretera y Dorset y Cornualles eran mucho más montañosos de lo que esperábamos".
Georgie también trabaja en un proyecto de Safe in Scotland, donde vive desde hace seis años, para proporcionar alojamiento y apoyo a personas que sufren indigencia relacionada con el asilo.
En un comunicado del mes pasado, ACNUR advirtió que el proyecto de ley de nacionalidad y fronteras "penalizaría a la mayoría de los refugiados que buscan asilo en el país mediante sanciones perjudiciales e injustificadas" si entra en vigor.
"Es necesario concienciar más sobre estos temas", declaró Georgie.
"Es horrendo lo que tienen que soportar los solicitantes de asilo en el Reino Unido. Reciben menos de 6 libras al día para vivir, para comer, vestirse y todo lo demás, y eso si tienen la suerte de recibir siquiera esa ayuda mínima".
Tras recorrer más de 2.400 kilómetros en bicicleta, superando el anterior récord mundial Guinness de mayor recorrido en bicicleta, de 761 kilómetros, lo más difícil para el dúo ciclista fue el trabajo administrativo durante el viaje.
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Los estrictos criterios para obtener el récord oficial exigían que la pareja rellenara un libro de registro de testigos cada 20 kilómetros para verificar su presencia en ese momento y lugar. Además, debían grabar cada día innumerables fotos y vídeos de diez minutos de duración, y luego presentarlos.
"Hay mucha administración detrás de la consecución de un récord mundial, y fue difícil gestionarlo con el cansancio que conlleva el viaje entre el tráfico, los viajes en tren y las colinas mientras llevamos nuestras mochilas", explicó Georgie.
La pareja también sufrió un dolor insoportable en las rodillas, a pesar de ser ciclistas experimentados.
Aunque agotador, el esfuerzo del dúo dio sus frutos.
El 18 de septiembre, a las 7 de la tarde, en la playa de Dover (Kent), Georgie y David completaron la última letra con otros 30 ciclistas, recaudando cerca de 55.000 libras (75.000 dólares).
"Fue una sensación realmente intensa al final, porque hemos pasado todo un mes montando en bicicleta constantemente y estando en movimiento, y hemos batido el récord mundial", dijo Georgie.
El éxito del reto, explicó, se debió a que cientos de personas normales y corrientes hicieron algo para ayudar. "Su impulso de positividad hizo que los duros días en la carretera fueran mucho más fáciles de sobrellevar", dijo.
Todo el mundo nos ha apoyado mucho, e incluso en lugares en los que no estábamos seguros de que fueran a apoyar nuestra causa, lo han hecho de verdad. Se trata de dedicar tiempo a hablar con la gente y hacer lo que mejor sabemos hacer para concienciar.
"Todo el mundo quiere poner de su parte para ayudar. Es reconfortante".
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