"La situación fiscal en Palestina está llegando a un "punto de ruptura", advirtió el martes el enviado de paz de la ONU para Oriente Medio, informa la Agencia de Noticias Anadolu.
"Los gastos superan con creces los ingresos, y la diferencia es cada vez mayor. El apoyo de los donantes, incluido el apoyo presupuestario directo, sigue disminuyendo desde hace varios años", declaró Tor Wennesland ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
Wennesland dijo que Palestina tendrá un déficit presupuestario en 2021 de alrededor de 800 millones de dólares, lo que, según él, casi duplicará la brecha de 2020. Además, la capacidad de endeudamiento de Palestina con los bancos se ha agotado.
Israel sigue descontando millones de dólares al mes de las transferencias de ingresos por compensación, lo que, según el enviado de la ONU, contribuye a la crisis financiera.
"Deben aplicarse reformas y cambios políticos significativos -tanto por parte de los israelíes como de los palestinos- para hacer frente a los desafíos estructurales", dijo Wennesland.
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