Los rezos masivos del viernes se reanudaron en Teherán tras un paréntesis de 20 meses debido a la pandemia de COVID-19, según informó hoy la televisión estatal.
Los rezos en la Universidad de Teherán, un encuentro de importancia religiosa y política, se produjeron mientras las autoridades advertían de una sexta oleada del coronavirus, que hasta ahora se ha cobrado 124.928 vidas en Irán y ha afectado a más de 5,8 millones de personas.
Las escuelas con menos de 300 alumnos también deben reabrir mañana.
También a partir de mañana, los empleados del gobierno, excepto los de las fuerzas armadas, no podrán trabajar si no están vacunados al menos con una primera dosis, según una circular del gobierno publicada a principios de esta semana.
Según el gobierno, más de 28,2 millones de personas han recibido hasta ahora la segunda dosis de la vacuna COVID-19.
"Hoy es un día muy dulce para nosotros. Damos las gracias al Todopoderoso por devolvernos las oraciones del viernes después de un período de restricciones y privaciones", dijo Mohammad Javad Haj Ali Akbari, el imán interino de la oración del viernes de Teherán que dirigió los sermones.
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Los fieles tuvieron que respetar el distanciamiento social y usar máscaras faciales durante la reunión, la mayoría llevó sus propias alfombras de oración y las tablillas de arcilla que usan los musulmanes chiítas durante la postración, dijo la transmisión.
Se dijo que las oraciones del viernes también se realizaron en otras ciudades iraníes.
El ministro de Sanidad, Bahram Einollah, dijo a principios de esta semana que era una "certeza" que Irán se enfrentaría a una sexta oleada la próxima semana. La advertencia se produjo incluso cuando el país ha acelerado su campaña de vacunación.
Einollahi añadió que su país estaba bien preparado para la nueva oleada.
Las escuelas con más de 300 alumnos reabrirán el 6 de noviembre, dijo a principios de esta semana Alireza Kamarei, portavoz del Ministerio de Educación de Irán, y añadió que no era esencial que los alumnos y los profesores se vacunaran. Dijo que el 85% de los profesores del país y el 68% de los estudiantes habían sido inoculados hasta ahora y que las aulas estaban bien ventiladas.
La distancia social requerida era de al menos un metro y medio.