Azerbaiyán ha destruido más de 48.000 minas y municiones sin detonar colocadas por el ejército armenio en las regiones liberadas de la ocupación, informa la Agencia de Noticias Anadolu.
La Agencia de Acción contra las Minas de Azerbaiyán (ANAMA) y la unidad de ingeniería de las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán, con el apoyo del Ministerio de Situaciones de Emergencia, el Comando de Servicios Fronterizos y los equipos especiales de desminado de las Fuerzas Armadas de Turquía, continúan eliminando las minas en la región de Karabaj y las provincias circundantes.
Desde el 10 de noviembre de 2020, los expertos en desminado han barrido un total de 18.302 hectáreas de terreno. Hasta el 15 de octubre de 2021 se habían detectado y destruido 22.230 artefactos sin explotar, 17.426 minas antipersona y 8.755 minas antitanque.
El presidente de ANAMA, Vugar Suleymanov, declaró a la Agencia Anadolu que las carreteras, las vías férreas y las zonas de instalaciones o asentamientos son una prioridad en los esfuerzos de desminado.
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"Intercambiamos experiencias con organizaciones turcas y ampliaremos la cooperación con Turquía en el ámbito del desminado", dijo Suleymanov.
Las minas terrestres constituyen una grave violación de las normas y principios esenciales del derecho internacional humanitario, incluidos los Convenios de Ginebra de 1949.
Hasta 33 ciudadanos azerbaiyanos, entre ellos siete soldados y 26 civiles, murieron y 139 resultaron heridos a causa de las minas colocadas por Armenia durante el periodo de ocupación.
Liberación de Karabaj
Las relaciones entre las antiguas repúblicas soviéticas de Azerbaiyán y Armenia han sido tensas desde 1991, cuando el ejército armenio ocupó Nagorno-Karabaj, también conocido como Alto Karabaj, territorio reconocido internacionalmente como parte de Azerbaiyán, y siete regiones adyacentes.
Cuando estallaron nuevos enfrentamientos el 2 de septiembre de 2020, el ejército armenio lanzó ataques contra civiles y fuerzas azerbaiyanas y violó varios acuerdos de alto el fuego humanitario.
Durante los 44 días de conflicto, Azerbaiyán liberó varias ciudades y casi 300 asentamientos y pueblos de la ocupación de casi tres décadas.
El 10 de noviembre del año pasado, los dos países firmaron un acuerdo con la mediación de Rusia para poner fin a los combates y trabajar por una solución global.
El 11 de enero, los dirigentes de Rusia, Azerbaiyán y Armenia firmaron un pacto para desarrollar los vínculos económicos y las infraestructuras en beneficio de toda la región. El pacto incluía la creación de un grupo de trabajo trilateral sobre el Karabaj.
El alto el fuego se considera una victoria para Azerbaiyán y una derrota para Armenia, cuyas fuerzas armadas se retiraron conforme al acuerdo.
Antes de esta victoria, cerca del 20% del territorio de Azerbaiyán había estado bajo ocupación ilegal durante casi 30 años.