La embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, se reunió el martes con el ministro de Defensa israelí, Benny Gantz, y le instó a detener las actividades de asentamiento. Thomas-Greenfield también se comprometió a reponer el sistema de defensa antimisiles Cúpula de Hierro del Estado de ocupación. "Apoyaremos la capacidad de Israel para defenderse", dijo el Times of Israel.
Según el Departamento de Estado de EE.UU., la embajadora aprovechó su reunión con Gantz para destacar la actividad de asentamientos en la Cisjordania ocupada, así como el desalojo de palestinos de sus hogares en la Jerusalén ocupada.
La embajadora instó al ex general a evitar tomar medidas que socaven las perspectivas de una solución de dos Estados. Los asentamientos ilegales de Israel se consideran un obstáculo para dicha solución, al igual que los desalojos, de los que se ha hecho mucha publicidad.
Según el Times of Israel, por primera vez desde que Biden accedió al cargo, Israel ha avanzado en sus planes para construir unas 3.000 unidades más de asentamientos en la Cisjordania ocupada. Esto es lo que preocupa a Washington.
La cuestión de los desalojos palestinos ha sido una espina en el costado de las relaciones bilaterales durante meses. Estados Unidos ha advertido a Israel de que no debe desalojar a los residentes de sus casas en Sheikh Jarrah y otros barrios de la Jerusalén ocupada.
Thomas-Greenfield también habló de la ampliación de los llamados Acuerdos de Abraham, y de la necesidad de reducir la tensión entre israelíes y palestinos.
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