Las oenegés palestinas llamaron ayer a boicotear a la enviada estadounidense a la ONU, Linda Thomas-Greenfield, por su decisión de no reunirse con representantes de las seis oenegés palestinas prohibidas por Israel, según un comunicado.
Esto se produjo cuando Al-Quds Al-Arabi informó de que un funcionario estadounidense había dicho: "Thomas-Greenfield no se reunirá con ninguno de los representantes de las organizaciones palestinas de la sociedad civil y de derechos humanos que Israel ha designado recientemente como organizaciones "terroristas"".
En su declaración, las oenegés dijeron: "El ataque israelí a las seis organizaciones de la sociedad civil palestina es un ataque a la sociedad civil palestina en su conjunto. La falta de voluntad del embajador de Estados Unidos para reunirse con los representantes de las seis ONG refuerza el ataque de Israel, que pretende socavar y deslegitimar la labor de derechos humanos de la sociedad civil palestina".
Thomas-Greenfield, añadieron, pretendía "explorar formas de reforzar los acuerdos de normalización, como los "Acuerdos de Abraham"".
Y añadía: "Nuestras organizaciones subrayan que el beneficio económico y la 'paz en la región' no son más que una hoja en blanco.
Una "paz" que no incluya la realización de los derechos de todos los palestinos será una paz sin justicia, y por tanto no será ninguna paz".
Hicieron un llamamiento a otras oenegés para que no se reúnan con el enviado de EE.UU. "para demostrar su negativa clara y de principios a rechazar la normalización de la limpieza étnica del pueblo palestino".
"Además, pedimos a las misiones diplomáticas, a los representantes parlamentarios y a las organizaciones internacionales que rechacen y condenen la designación ilegal de las seis oenegés palestinas, que presionen a Estados Unidos para que condene la designación de Israel y pida su anulación".
Shawan Jabarin, director general de Al Haq, una de las seis organizaciones prohibidas por Israel, dijo: "Ha llegado el momento de que la comunidad internacional y el pueblo palestino se levanten colectivamente y se opongan a esta atroz normalización regional, para garantizar la realización de nuestro pueblo a la autodeterminación y la soberanía permanente, y para impedir las medidas israelíes y regionales encaminadas a borrar a nuestro pueblo, nuestra cultura, nuestras tierras y nuestro hogar".