El líder de la rama norte del Movimiento Islámico en Israel, Sheikh Raed Salah, declaró que pasó todo el tiempo que estuvo detenido en régimen de aislamiento y que fue trasladado repetidamente de una celda a otra.
Tras ser liberado ayer, Salah dijo que la ocupación israelí le impuso unas condiciones carcelarias "muy duras" para impedirle estar en contacto con cualquier otro detenido. "Me mantuvieron en la celda de aislamiento del departamento de aislamiento", dijo.
"Mi vida en la cárcel estuvo llena de penurias y opresión", dijo. "Pretendían mantenerme sin palabras todo el tiempo".
"Pero ahora soy libre".
Salah fue detenido por las fuerzas israelíes en agosto de 2017 y acusado de incitación a raíz de sus críticas a la instalación de detectores de metales en el recinto de la mezquita Al-Aqsa de Jerusalén.
Fue condenado a 28 meses de prisión por un tribunal israelí. Cumplió 11 meses, la mitad de ellos en régimen de aislamiento, antes de ser trasladado a arresto domiciliario.
Tras dos años de arresto domiciliario, en agosto de 2020, Salah comenzó a cumplir una condena de 17 meses de cárcel por cargos de incitación, pasando todo el periodo en régimen de aislamiento.
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