Un diplomático estadounidense afincado en el Líbano, detenido en Turquía como sospechoso de vender a un ciudadano sirio un pasaporte falso por 10.000 dólares, ha sido puesto en prisión preventiva, según informó ayer la policía turca.
La detención se produjo tras un incidente ocurrido el 11 de noviembre en el aeropuerto de Estambul, cuando el ciudadano sirio intentó utilizar el pasaporte de otra persona para viajar a Alemania, según un comunicado de la Dirección de Seguridad de Estambul.
Ese pasaporte pertenecía al diplomático en prisión preventiva, que trabaja en el Consulado de Estados Unidos en la capital libanesa, Beirut, dijo.
El comunicado añade que las imágenes de las cámaras de seguridad muestran que los dos sospechosos se encontraron en el aeropuerto y se cambiaron de ropa allí y que el diplomático estadounidense le dio al sirio el pasaporte en cuestión.
En el registro corporal del diplomático se encontraron 10.000 dólares en un sobre y un pasaporte a su nombre, añade el comunicado.
El ciudadano sirio se enfrenta a cargos por la falsificación, pero fue puesto en libertad a la espera de juicio, mientras que el diplomático estadounidense quedó en prisión preventiva.
Los diplomáticos extranjeros gozan habitualmente de inmunidad judicial, pero pueden ser procesados y castigados en los países donde no están acreditados.
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