Colonos israelíes han arrancado el viernes 400 olivos en la aldea palestina ocupada de Cisjordania de Deir Sharaf, según han declarado algunos testigos.
Uno de los testigos, Ghassan Daghlas, vigila las violaciones de los asentamientos coloniales israelíes en el norte de Cisjordania y explicó que los colonos irrumpieron en una parcela conocida como Al-Harayek y cortaron los árboles.
Los propietarios del terreno fueron identificados como Abdul Rahim, Abdul Hamid y Ghazi Antari, todos ellos habitantes de Deir Sharaf.
Ghazi Antari contó que fue a su granja de 68 dunam y descubrió que los colonos habían talado 320 olivos, que había plantado hace tres años.
Daghlas dijo que no era la primera vez, ya que los colonos habían destruido unos 600 arbolitos hace casi un mes.
Mientras tanto, un grupo de colonos israelíes arrancó 90 plantones de olivo y árboles pertenecientes a agricultores palestinos en la aldea de Yasuf, en Salfit (Cisjordania).
Jamal Salama, un palestino residente en la aldea de Yasuf, en Salfit, contó que los colonos arrancaron 70 plantones de olivo de su propiedad después de que asaltaran su granja cerca de la aldea.
Samer Rashed, otro palestino residente en el pueblo, dijo que unos 20 olivos de su propiedad fueron cortados por los colonos que asaltaron su granja.
La violencia de los colonos contra los palestinos y sus propiedades es habitual en la Cisjordania ocupada y rara vez es sancionada por las autoridades israelíes. Los palestinos, los observadores locales e internacionales y los funcionarios creen que el gobierno israelí respalda la violencia de los colonos.
Más de 700.000 israelíes viven en asentamientos exclusivos para judíos en Cisjordania ocupada y Jerusalén Este, violando el derecho internacional.
El número de colonos casi se ha triplicado desde los Acuerdos de Paz de Oslo firmados entre Israel y la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en 1993, según datos oficiales de la Autoridad Palestina (AP).
En 1993, el número de colonos se estimaba en 252.000, según los datos de la AP. Los asentamientos coloniales ilegales han aumentado de 144 en 1993 a 515 en la actualidad.