Quejándose de la influencia extranjera y de la fragmentación de la opinión pública, un destacado ex primer ministro libanés anunció el lunes que había "suspendido" su trabajo en la política libanesa, informa la Agencia de Noticias Anadolu.
En una conferencia de prensa televisada, el tres veces primer ministro, Saad Hariri, dijo que no se presentará a las próximas elecciones parlamentarias y que no presentará ninguna candidatura de su partido político, el Movimiento del Futuro.
"Estoy convencido de que no hay lugar para ninguna oportunidad positiva para Líbano a la luz de la influencia iraní, la confusión internacional, la división nacional, el sectarismo y el desgaste del Estado", dijo Hariri.
"Anuncio la suspensión de mi trabajo en la vida política", dijo, y llamó a su partido a no participar en las elecciones legislativas previstas para el 25 de mayo.
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"Nuestra decisión es suspender cualquier papel o responsabilidad directa en el poder y la política en su sentido tradicional", añadió.
Hariri, una destacada figura suní, entró en la política tras el asesinato de su padre, Rafik Al-Hariri, en 2005.
Su retirada se produce en medio de una agobiante crisis económica, una profunda pobreza y la inercia política para encontrar soluciones.