El actual emir de Qatar tiene previsto visitar Washington el 31 de enero, según informaron a Reuters dos fuentes familiarizadas con el asunto, en un viaje en el que probablemente se abordará el tema de Afganistán, la seguridad de los suministros de gas a Europa y la cuestión de Irán.
La visita del jeque Tamim bin Hamad Al-Thani, la primera desde que el presidente Joe Biden asumió el cargo hace un año, se produce mientras Washington discute con los estados y empresas productoras de energía un posible desvío de los suministros a Europa, si Rusia invade Ucrania.
El Secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, discutió el asunto en una llamada telefónica el lunes con el Ministro de Asuntos Exteriores de Qatar, uno de los principales productores de gas natural licuado, dijo una de las fuentes.
A Washington le preocupa que un posible asalto militar ruso a Ucrania pueda desencadenar sanciones estadounidenses y europeas a Moscú, lo que detendría el suministro de gas ruso a Europa. Rusia niega que tenga previsto atacar a Ucrania.
El suministro mundial de gas ya es escaso y los envíos de Qatar Energy están sujetos a contratos de suministro a largo plazo que la empresa no puede romper fácilmente.
VIDEO: EE.UU. y Qatar negocian el suministro de gas a la UE en caso de que Rusia invada Ucrania
La visita del jeque Tamim pretende aprovechar las relaciones con su aliado, Washington, que se han fortalecido desde que Doha acogió las conversaciones que condujeron al acuerdo de 2020 para la retirada de las tropas estadounidenses de Afganistán, y desempeñó un papel fundamental en los esfuerzos de evacuación durante la retirada estadounidense. Qatar también se ha convertido en el representante diplomático de Estados Unidos en Afganistán, ahora bajo el gobierno islamista de los talibanes.
Qatar y Turquía están negociando con la administración talibán la gestión de las operaciones del aeropuerto internacional de Kabul, el principal enlace aéreo internacional del país sin salida al mar.
También se espera que el jeque Tamim y Biden discutan los esfuerzos de las potencias mundiales para salvar el pacto nuclear de 2015 con Irán, con el que Doha tiene vínculos, así como los esfuerzos para poner fin a la guerra de Yemen, dijeron las fuentes.
La visita del Emir también se produce en medio de una espiral de disputas entre Qatar Airways y la europea Airbus, rival del fabricante de aviones estadounidense Boeing.
Airbus revocó un pedido de aviones de Qatar Airways después de que la aerolínea qatarí demandara al fabricante de aviones por más de 600 millones de dólares por defectos de pintura y superficie que, según la aerolínea, le obligaron a dejar en tierra 21 aviones A350.