El Secretario General de la Unión General Tunecina del Trabajo (UGTT), Noureddine Taboubi, anunció el viernes que el poder adquisitivo de los tunecinos ha disminuido en un 38%, a pesar de que las cifras oficiales indican un descenso del 25%.
"La situación económica y social de los trabajadores se está deteriorando, y la tasa de inflación oficial, que apunta al cinco y al seis por ciento, no es real, sino que la supera", explicó Taboubi a los periodistas, durante una reunión del sindicato en Gafsa.
Taboubi pidió que se dejen de lado las diferencias y se celebre un diálogo nacional antes de las elecciones.
"La necesidad requiere la reunión de todos los partidos políticos en la mesa de un diálogo nacional, además de dejar de lado todas las diferencias y abandonar el principio de los intereses estrechos para llegar a las elecciones", continuó Taboubi.
Subrayó: "Tenemos que superar la diferencia de considerar lo ocurrido el pasado 25 de julio como un golpe de Estado o no. De hecho, el pueblo tunecino está pagando la factura de esta diferencia, además del deterioro de las condiciones sociales y económicas."
"La diferencia de ideas garantiza la producción de un buen diálogo, pero lo que está ocurriendo hoy en Túnez no hará más que empeorar la situación y profundizar la crisis. Como organización sindical que se dirige a los intereses nacionales, no nos quedaremos callados ante esta situación", añadió Taboubi.
Desde el 25 de julio, Túnez sufre una grave crisis política cuando el presidente Kais Saied impuso "medidas excepcionales", entre ellas la suspensión del Parlamento, la promulgación de leyes mediante decretos presidenciales, la destitución del gobierno y el nombramiento de uno nuevo.
La mayoría de las fuerzas políticas y civiles de Túnez, incluido el Movimiento Ennahda, que tiene mayoría parlamentaria, rechazan estas medidas y las consideran un "golpe de Estado contra la Constitución". Otras fuerzas, sin embargo, las apoyan y las consideran una corrección del rumbo de la revolución de 2011, que derrocó el gobierno del ex presidente Zine El Abidine Ben Ali.