Amnistía Internacional pidió ayer a las autoridades argelinas que pongan fin a la persecución arbitraria de los activistas de Hirak y liberen inmediata e incondicionalmente a todos los activistas pacíficos.
En una petición que circula en el portal web de la organización y en las plataformas de las redes sociales, Amnistía dijo que hasta "40 detenidos han iniciado una huelga de hambre colectiva en protesta por las falsas acusaciones presentadas contra ellos por ejercer su libertad de expresión".
"Las autoridades argelinas están aprovechando la pandemia del COVID-19 para acelerar el ritmo de la represión contra los activistas de Hirak, encarcelar a sus opositores y silenciar a los medios de comunicación", ha señalado Amnistía.
"Desde febrero de 2019 se está produciendo un movimiento pacífico en Argelia. Conocido como el movimiento Hirak, estas protestas han pedido un cambio político radical en Argelia y los manifestantes se han enfrentado a la represión del gobierno", añadió.
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Las autoridades argelinas no comentaron la petición de Amnistía. Sin embargo, a primera hora del sábado, la Fiscalía del Consejo Judicial de Argel refutó lo que dijo que eran "noticias incorrectas difundidas por los medios de comunicación en relación con la entrada en huelga de hambre de un grupo de detenidos en la prisión de El Harrach".
El comunicado calificó las informaciones de los medios de comunicación de "malintencionadas y que contienen informaciones erróneas", advirtiendo que "los promotores de estas informaciones que perjudican la seguridad y la estabilidad de las instituciones, pueden ser objeto de responsabilidades penales".
Una organización local de derechos humanos, el Comité Nacional para la Liberación de los Detenidos, afirma haber documentado la detención de más de 300 presos de conciencia en el país, detenidos hace meses durante las protestas contra el régimen.