La incertidumbre y la expectación han caracterizado el panorama político en Libia después de que el parlamento designara a Fathi Bashagha como nuevo jefe de gobierno.
El Alto Consejo de Estado de Libia anunció ayer que hoy se celebrará una sesión para escuchar la agenda del nuevo jefe de gobierno en medio de un estado de expectación y de la inminente división política. Mientras tanto, el jefe del Gobierno de Unidad Nacional (GUN), Abdul Hamid Dbeibeh, sigue en su puesto actual.
El Consejo de Diputados, con sede en Tobruk, votó el jueves al ex ministro del Interior Bashagha como nuevo jefe de gobierno.
Bashagha pidió al GNU que se adhiera a la democracia y al traspaso pacífico del poder, mientras que Dbeibeh subrayó que está preparando una iniciativa para resolver la crisis política, rechazando "los intentos de arrastrar a los libios a una nueva guerra civil".
Naciones Unidas indicó que sigue reconociendo a Dbeibeh como jefe de gobierno del país.
La tensión entre Bashagha y Dbeibeh devuelve a Libia a la fase de división política que vivió el país después de 2014. Esto se produce en un momento en el que se teme un conflicto por la legitimidad entre los dos gobiernos.
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