Las fuerzas de ocupación israelíes y los colonos judíos, entre los que se encuentra el parlamentario extremista Itamar Ben-Gvir, han reanudado sus ataques contra el barrio de Sheikh Jarrah, en la Jerusalén ocupada. Según la agencia de noticias Wafa, los israelíes han bloqueado la entrada occidental del barrio y han agredido a los residentes locales y a los activistas de la solidaridad con balas de metal recubiertas de goma, gases lacrimógenos y bombas de sonido. Han resultado heridos decenas de personas y siete han sido detenidas.
Las fuerzas de ocupación también han desplazado a los activistas que se encontraban cerca de la casa de la familia Salem, amenazada de expulsión inminente para dejar paso a los colonos de extrema derecha. Ben-Gvir incluso ha abierto una oficina en Sheikh Jarrah mientras continúan los ataques de los colonos judíos a los palestinos y sus propiedades.
La policía israelí intentó sacar a Ben-Gvir de la zona para reducir la tensión, informó el Times of Israel. Un funcionario policial no identificado dijo al Canal 12 que el diputado de la Knesset había hecho una "contribución sustancial" a la escalada de violencia.
"La policía ha cruzado todas las líneas posibles esta noche", tuiteó Ben Gvir antes de perder el conocimiento cuando la policía intentó sacarlo de Sheikh Jarrah. "Mientras nuestros representantes se sentaron con el comandante del distrito para lograr una seguridad policial permanente, decenas de policías vienen, usan una violencia severa contra los activistas de derecha y contra mí, e intentan destruir la oficina parlamentaria".