Aunque Israel parece, en su posición sobre la guerra rusa contra Ucrania, como si fuera un actor libre en la elección de una determinada política neutral, así como en el cambio y la alteración de la misma a veces, una mirada más cercana muestra que esta política se basa principalmente en el beneficio del estado de ocupación, ya sea en el horizonte previsible, o en el largo plazo. Lo que puede decirse, en el momento actual, es que esa guerra tiene beneficios, algunos de los cuales discutiremos en este artículo, pero esto no significa que las cosas se queden en oportunidades y no produzcan pérdidas.
Quizás el primer beneficio, que está claro desde ahora, es el aumento de la demanda, especialmente desde Europa, de los productos de las industrias de seguridad israelíes, ya sean gubernamentales o privadas. Según los informes del periódico económico israelí TheMarker, estas industrias se encuentran actualmente en un estado de euforia, debido a las prisas del canciller alemán, Olaf Scholz, en torno a su rápida visita a Israel, anunció que su país destinará 113.000 millones de dólares de su presupuesto de 2022 a reforzar el ejército alemán. También dijo que el gobierno aumentará el presupuesto de defensa alemán y gastará al menos el 2% de su PIB cada año, sugiriendo que este compromiso se añada a la constitución alemana.
Según los funcionarios de las industrias de seguridad israelíes, el volumen de solicitudes que han recibido estas industrias en el último periodo es una locura, y de toda Europa. Las solicitudes proceden principalmente de países vecinos de Rusia o adyacentes al campo de batalla, como Hungría, Bulgaria, la República Checa, Rumanía, Eslovaquia y Suecia, y están interesados en que se les suministren inmediatamente drones, sistemas electrónicos de combate, sistemas de control y vigilancia, y sistemas de comunicaciones y armamento.
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Según ha confirmado una fuente de alto rango de las industrias de seguridad israelíes, los europeos se han dado cuenta, tras la guerra actual, de que el origen del peligro ha cambiado. Sus evaluaciones anteriores indicaban que la amenaza más peligrosa para la seguridad era China, y no tenían en cuenta a Rusia. Ahora saben que la amenaza procede de China y de Rusia, y quizá de una combinación de ambas, ya que todo lo ocurrido en Ucrania comenzó tras la reunión entre Putin y el presidente chino Xi Jinping en los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín. Desde entonces, la tensión se renovó tras la amenaza de China a Taiwán. Según la fuente, sólo este asunto creó oportunidades sin precedentes para Israel y sus industrias de seguridad, y las posibilidades futuras son aún más locas.
No hace falta decir que Israel no ve este asunto sólo desde el punto de vista económico, a pesar de su importancia, sino también desde el punto de vista de adquirir socios en su método político hacia la cuestión de Palestina y a nivel regional, como es el caso de su visión de los acuerdos comerciales de seguridad con regímenes oscuros de todo el mundo.
El segundo beneficio es la afluencia de judíos de Ucrania, Rusia y Europa. Tengo que reiterar aquí que Israel considera la cuestión demográfica un área de máximo interés en términos de su seguridad nacional. En el contexto demográfico, utiliza varios medios con el pretexto de preservar su seguridad nacional, incluida la aprobación de leyes y reglamentos para garantizar su carácter judío, entre los que destacan la Ley del Retorno, la Ley de Ciudadanía y la Ley del Estado Nacional. Otro medio que utiliza es la aplicación de una estricta política de visados de entrada al país, bajo la supervisión de la Autoridad de Población e Inmigración y los servicios de seguridad.
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En tercer lugar, recurre a la construcción de muros de separación, sobre todo el de Cisjordania. En cuarto lugar, refuerza las relaciones con las comunidades judías del mundo y fomenta la inmigración de judíos a Israel. Para ello, cuenta con dos ministerios: el de Aliá e Integración y el de Asuntos de la Diáspora, además de la actividad de la Agencia Judía. A esto se añade el hecho de que el equilibrio demográfico entre judíos y palestinos sigue siendo, desde el punto de vista de Israel, muy influyente en la cuestión de las fronteras permanentes de Israel, ya sea en el contexto de las negociaciones con los palestinos, o en la esencia del discurso político israelí dirigido al mundo.
Este artículo apareció por primera vez en árabe en Felesteen el 10 de marzo de 2022
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