El clérigo chiíta Muqtada Al-Sadr mantuvo conversaciones con altos cargos iraquíes sobre la forma de formar un gobierno y poner fin a la agobiante crisis política del país, informa la agencia de noticias Anadolu.
El presidente del Gobierno Regional del Kurdistán, Masoud Barzani, el presidente del Parlamento, Mohammed Al-Halbousi, el líder de la Coalición del Estado de Derecho, Nouri Al-Maliki, y el líder del Frente Al-Azm, Khamis Al-Khanjar, mantuvieron conversaciones telefónicas.
Las conversaciones se centraron en la resolución de la crisis de formación de gobierno y en otros "asuntos importantes relacionados con la situación actual de Irak", según el comunicado.
Debido a las diferencias entre las distintas fuerzas políticas, Irak ha sido incapaz de formar un nuevo gobierno desde las disputadas elecciones parlamentarias de octubre pasado.
Un portavoz de la Coalición del Estado de Derecho confirmó que Al-Maliki, ex primer ministro iraquí, recibió una llamada telefónica de Al-Sadr para discutir formas de "poner fin a la crisis actual".
Las conversaciones entre Al-Sadr y Al-Maliki suponen un avance notable en los esfuerzos por ultimar un gobierno, ya que el influyente clérigo chiíta, que lidera el mayor bloque parlamentario, se ha negado en el pasado a apoyar cualquier gobierno que incluya a Al-Maliki.
Al-Sadr, jefe de la Alianza Sairoon, acusa a Al-Maliki de corrupción masiva durante su mandato como primer ministro de 2006 a 2014, y le culpa de la aparición del grupo terrorista Daesh.