Un jugador de squash egipcio ha aprovechado su discurso de victoria en el Campeonato de Optasia en el Club Wimbledon para preguntar por qué a los deportistas se les permite hablar de Ucrania pero no de Palestina.
"Nadie debería aceptar ninguna matanza en el mundo, ni la opresión, pero nunca se nos ha permitido hablar de política en el deporte, pero de repente ahora se permite", dijo Ali Farag.
"Y ahora que está permitido, espero que la gente también vea la opresión en todo el mundo. Los palestinos han pasado por eso durante los últimos 74 años, pero supongo que como no encaja en la narrativa de los medios de comunicación de Occidente, no podíamos hablar de ello. Así que ahora podemos hablar de Ucrania, podemos hablar de Palestina".
Los analistas se han preguntado por qué los Estados occidentales, incluido el Reino Unido, impusieron sanciones a Rusia con tanta rapidez, pero han intentado prohibir la campaña de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS), liderada por los palestinos, contra las violaciones de derechos humanos de Israel.
Amnistía Internacional ha pedido a la ONU que imponga sanciones selectivas contra Israel por su incumplimiento del derecho internacional y la comisión de crímenes contra la humanidad, pero los gobiernos occidentales las han rechazado.
Tras un llamamiento del Comité Olímpico Internacional, varios deportes han prohibido a los atletas rusos competir a nivel internacional, como el hockey, el patinaje sobre hielo, el esquí y el baloncesto.
Mientras las sanciones se ampliaban más allá del sistema financiero, la economía y las aerolíneas rusas, la FIFA impuso una prohibición de un año para que Rusia jugara partidos de clasificación para el Mundial.
Los activistas han intentado durante años sancionar a Israel en eventos deportivos internacionales, pero se les ha negado con el pretexto de que querían mantener el deporte al margen de la política.
A principios de este mes, el diputado irlandés Richard Boyd Barrett denunció el doble rasero del gobierno irlandés respecto a la invasión rusa de Ucrania y la ocupación israelí.
"Están contentos de utilizar correctamente el lenguaje más fuerte y robusto para describir los crímenes contra la humanidad de Vladimir Putin, pero no van a utilizar la misma fuerza de lenguaje cuando se trata de describir el tratamiento de Israel a los palestinos cuando ahora está siendo documentado y detallado por dos de las organizaciones de derechos humanos más respetadas en el mundo", dijo.
"Cinco días para las sanciones contra Putin y sus secuaces", continuó, "70 años de opresión a los palestinos".
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