El partido yemení Al-Islah criticó ayer al gobierno por no incluir a su alto funcionario secuestrado, Muhammad Qahtan, en las conversaciones de canje de prisioneros con el movimiento hutí respaldado por Irán. El secretario general del partido dijo a Yemen Shabab que Al-Islah estaba al tanto de las "conversaciones supervisadas por la ONU" sobre dicho acuerdo.
"Nos sorprende que uno de nuestros altos cargos, Muhammad Qahtan, que está retenido por los hutíes desde abril de 2015, no haya sido incluido en el acuerdo", dijo Abdul Wahhab Al-Anisi. "A Qahtan se le ha impedido ver a su familia desde que fue secuestrado en su casa. Está retenido en condiciones atroces".
Recientemente se informó de que las partes beligerantes de Yemen habían discutido y acordado un posible intercambio de prisioneros. Se dice que entre los 823 prisioneros que los hutíes van a intercambiar hay 804 soldados yemeníes y detenidos políticos, 16 soldados saudíes y tres soldados sudaneses. Se cree que el canje también supondrá la liberación de Nasser Mansour Hadi, hermano del presidente yemení Abdrabbuh Mansour Hadi, y de Mahmoud Al-Subaihi, su antiguo ministro de Defensa.
El empobrecido Yemen está sumido en el conflicto desde que los hutíes expulsaron al gobierno de la capital, Saná, a finales de 2014. La guerra se intensificó después de que una coalición liderada por Arabia Saudí interviniera en marzo de 2015 para apoyar al gobierno reconocido internacionalmente.
La ONU ha dicho que el conflicto ha creado la peor crisis humanitaria del mundo.
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