Colonos israelíes arrancaron 170 olivos en el pueblo de Al-Lubban ash-Sharqiya, situado al sur de Nablus, informó la agencia de noticias Wafa.
Ghassan Daghlas, funcionario que vigila las violaciones israelíes en la zona, dijo que los colonos extremistas robaron los olivos de la zona de Al-Rahwat, propiedad de dos residentes palestinos locales.
Añadió que los colonos, anoche, intensificaron sus violaciones contra los palestinos y sus propiedades en la ciudad ocupada de Naplusa, en Cisjordania.
La violencia de los colonos contra los palestinos y sus propiedades es habitual en Cisjordania ocupada y rara vez es sancionada por las autoridades israelíes. Los palestinos, los observadores locales e internacionales y los funcionarios creen que el gobierno israelí respalda la violencia de los colonos.
Además, los olivos son un símbolo del apego de los palestinos a su tierra. Resistentes a la sequía, que crecen en suelos pobres y que viven y dan fruto desde hace miles de años, los árboles representan la resistencia y la capacidad de recuperación de los palestinos frente a la ocupación israelí.
Más de 700.000 israelíes viven en asentamientos exclusivos para judíos en la Cisjordania ocupada y en Jerusalén Este, violando el derecho internacional.