La Sinagoga Tzedek de Chicago se declara "antisionista" en una declaración en la que denuncia la creación de Israel como una "injusticia contra el pueblo palestino". La sinagoga se creó para atender a los judíos desencantados con Israel y escépticos con el sionismo en general. Anteriormente se había autodenominado "no sionista", pero hace unos días lo cambió por "antisionista".
"Los miembros de Tzedek Chicago votaron para afirmar el antisionismo como un valor fundamental de nuestra congregación", publicó la sinagoga en su cuenta de Twitter. Antes de celebrar una votación al respecto, los miembros organizaron una conferencia sobre "La Torá más allá del sionismo" con el profesor Shaul Magid, miembro distinguido de estudios judíos en el Dartmouth College, que preguntó: "¿Es buena la hegemonía sionista para el judaísmo estadounidense?"
Al explicar su decisión, Tzedek Chicago dijo que el sionismo -que describe como "un movimiento para establecer un Estado nacional judío soberano en la Palestina histórica"- depende del mantenimiento de una mayoría demográfica judía en la tierra. "Desde su creación, Israel ha tratado de mantener esta mayoría despojando sistemáticamente a los palestinos de sus hogares por diversos medios, como la expulsión militar, la demolición de viviendas, la expropiación de tierras y la revocación de los derechos de residencia, entre otros."
Citando los informes de derechos humanos que califican a Israel de Estado de apartheid, Tzedek Chicago dijo "Cada vez es más difícil negar la injusticia fundamental en el núcleo del sionismo. En su informe de 2021, el grupo israelí de derechos humanos B'Tselem concluyó que Israel es un "Estado de apartheid", describiéndolo como "un régimen de supremacía judía desde el río hasta el mar". Ese mismo año, Human Rights Watch publicó un informe similar en el que afirmaba que las "privaciones de Israel son tan graves que equivalen a los crímenes contra la humanidad del apartheid y la persecución"."Dada la realidad de esta injusticia histórica y continua, hemos llegado a la conclusión de que no es suficiente con describirnos como 'no sionistas' porque este término neutral no hace honor a la premisa antirracista central de que las estructuras de opresión no pueden ser simplemente ignoradas; al contrario, deben ser transformadas".
Desestimando la acusación de que el antisionismo es antisemitismo, el grupo dijo: "Es falso afirmar que la oposición al sionismo es fundamentalmente antisemita. El judaísmo (un pueblo religioso centenario) no es sinónimo de sionismo (una ideología nacionalista moderna que no es exclusivamente judía). Desde la fundación del movimiento sionista en el siglo XIX, siempre ha habido una activa oposición judía al sionismo".
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La declaración antisionista de la sinagoga de Chicago se produce en medio de una creciente ansiedad en Israel por la pérdida de apoyo al Estado dentro de las comunidades de la diáspora judía. El ministro de Asuntos de la Diáspora de Israel, Nachman Shai, ha declarado que "la desvinculación de los judíos de la Diáspora es significativa, peligrosa y negativa. Tenemos que forzar mucho este tema para que esté en la agenda".
Tzedek Chicago es el último en hacer caso al consenso internacional sobre derechos humanos de que Israel practica el apartheid. El pasado mes de julio, 160 académicos pidieron a la UE que dejara de financiar las universidades israelíes, citando el sistema racista de segregación de Israel. En noviembre, autores de todo el mundo apoyaron el boicot a Israel de la escritora Sally Rooney; Rooney también citó el régimen de apartheid del país.