Los países árabes han acogido con beneplácito la formación del Consejo de Liderazgo Presidencial de Yemen, encabezado por Rashad Al-Alimi, así como el apoyo financiero urgente proporcionado por Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos (EAU) a la economía yemení, informa la Agencia de Noticias Anadolu.
A primera hora del jueves, el presidente yemení, Abd-Rabbu Mansour Hadi, delegó sus poderes en el recién creado Consejo de Liderazgo Presidencial para gobernar el país durante el periodo de transición.
El Consejo está formado por siete vicepresidentes, entre ellos Aidarous Al-Zubaidi, jefe del Consejo de Transición del Sur y respaldado por los EAU.
Los otros miembros son Sultan Ali Al-Arada, Tariq Mohammed Saleh, Abdulrahman Abu Zara'a, Abdullah Bawazeer, Othman Hussein Megally y Farah Salmin Al-Bahsani.
El jueves, el príncipe heredero saudí, Mohammed bin Salman, se reunió con los miembros del Consejo encabezados por Al-Alimi, quienes se comprometieron en un tuit a trabajar en la reconstrucción del país y de su estado civil moderno, así como a proteger los logros de la revolución y la unidad.
En una declaración realizada por la agencia de noticias oficial SPA, Arabia Saudí expresó su "pleno apoyo al Consejo de Liderazgo Presidencial y a sus entidades de apoyo".
Instó al Consejo a "empezar a negociar con los hutíes, bajo la supervisión de las Naciones Unidas, para alcanzar una solución política definitiva y global que incluya un periodo de transición que haga avanzar a Yemen hacia la paz y el desarrollo."
Riad también prometió 3.000 millones de dólares en ayuda de emergencia a la economía yemení, de los cuales 1.000 millones serán aportados por los EAU, así como 300 millones de dólares para financiar la operación humanitaria de la ONU en Yemen.
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En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Kuwait acogió con satisfacción la formación del Consejo de Liderazgo Presidencial y afirmó su apoyo a éste en el desempeño de sus responsabilidades.
El Ministerio de Asuntos Exteriores jordano también se congratuló de la formación del Consejo, subrayando que Ammán "apoya los esfuerzos para resolver la crisis yemení con el fin de alcanzar una solución política", y agradeciendo a Arabia Saudí y a los EAU su apoyo financiero.
En un comunicado, el secretario del Consejo de Cooperación del Golfo, Nayef Al-Hajraf, se congratuló de la medida, subrayando su apoyo "en todo lo que logre la estabilidad en Yemen".
Por su parte, la Liga Árabe afirmó su apoyo al Consejo "como encarnación de la legitimidad yemení" y expresó su optimismo de que conduzca al país hacia la paz.
Yemen está sumido en la violencia y la inestabilidad desde 2014, cuando los rebeldes hutíes, alineados con Irán, capturaron gran parte del país, incluida la capital, Saná.
Una coalición liderada por Arabia Saudí, que pretende restablecer el gobierno yemení, ha empeorado la situación, provocando una de las peores crisis humanitarias del mundo provocada por el hombre. Casi el 80%, es decir, unos 30 millones de personas, necesitan ayuda humanitaria y protección, y más de 13 millones corren peligro de morir de hambre, según estimaciones de la ONU.
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