Los manifestantes incendiaron ayer una oficina del secretario chiíta Mahmoud Al-Sarkhi en la ciudad de Babil, en el sur de Irak.
La Agencia Anadolu informó de que los disturbios habían estallado en protesta por los recientes llamamientos de Al-Sarkhi a la demolición de santuarios chiíes en todo el país. Los manifestantes pidieron a las fuerzas de seguridad "que persigan a todos los que abusen de los símbolos religiosos".
La Comandancia de la Policía de Babilonia dijo en un comunicado que había cerrado todas las sedes de la autoridad religiosa de Sarkhi.
Al-Sarkhi es uno de los destacados referentes religiosos, que cuenta con una amplia base de seguidores en las provincias del sur de Irak. Rechaza las opiniones de la primera autoridad chiíta de Irak, dirigida por Ali Al-Sistani.
Los servicios de inteligencia iraquíes han detenido recientemente a una persona por insultar los símbolos religiosos en un vídeo y por pedir la demolición de todos los santuarios religiosos.