Rusia ha designado al antiguo comandante de su campaña en Siria para dirigir la invasión militar de Ucrania, mientras se retira de su ofensiva sobre la capital, Kiev.
Según funcionarios de seguridad y diplomáticos occidentales, el general Alexander Dvornikov ha sido nombrado por el presidente ruso Vladimir Putin para dirigir la estrategia de Moscú para llevar a cabo la captura y la seguridad del este de Ucrania.
El nombramiento se produce un mes y medio después del lanzamiento de la invasión de Putin, y es consecuencia de la fallida ofensiva sobre la capital ucraniana, Kiev, que fue frustrada y repelida por las fuerzas ucranianas a principios de este mes tras sufrir bajas masivas.
Ahora, Moscú ha decidido centrar sus esfuerzos en asegurar el este y el sur del país, donde se encuentran las regiones secesionistas de Donetsk y Luhansk, así como zonas estratégicas como la ciudad portuaria de Mariupol.
Se dice que Dvornikov es uno de los generales más avanzados y experimentados a disposición de Putin. Se le considera el candidato ideal para el puesto, con experiencia al mando de una división que asaltó con éxito la capital chechena, Grozni, en 1999 y 2000, dirigiendo la asistencia militar rusa al régimen sirio de Bashar Al-Assad en 2015 y 2016, y teniendo un papel destacado en la ocupación rusa de Ucrania desde 2014.
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Su papel en Siria, en particular, lo ha hecho tristemente célebre, dándole el apodo de "Carnicero de Siria" después de que aplicara las mismas tácticas usadas en Grozny sobre la importante ciudad de Alepo en 2016: el establecimiento de un asedio, el bombardeo de todas las infraestructuras, la matanza de civiles y la inanición de la población, y luego la entrada de fuerzas terrestres en la ciudad en ruinas tras su devastación.
Las fuerzas rusas han intentado aplicar tácticas similares en la invasión de Ucrania, pero ha sido un intento descentralizado y disperso. Muchos analistas afirman que el nombramiento de Dvornikov es para rectificar eso, centralizando todas esas operaciones bajo su mando y supervisión. Esos analistas, así como los funcionarios occidentales, también predicen que significa que se llevarán a cabo atrocidades cada vez más brutales contra la población ucraniana.
El lunes, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, declaró que Dvornikov "es un general que ya es responsable de supervisar atrocidades en Siria. Esperaríamos que hubiera una continuación del tipo de atrocidades que ya hemos visto tener lugar en Ucrania".
El portavoz del Pentágono, John Kirby, se hizo eco de esos comentarios y dijo: "Él y otros líderes rusos de alto rango han demostrado en el pasado, y particularmente en Siria, su desprecio por la prevención de daños a los civiles, su total desprecio en muchos aspectos por las leyes de la guerra, las leyes de los conflictos armados y la brutalidad con la que conducen y procesan sus operaciones." Predijo que "podemos decir con certeza, por lo que hemos visto en el pasado, que probablemente estamos pasando otra página en el mismo libro de la brutalidad rusa".
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