El ex primer ministro británico, David Cameron, hizo ayer una firme defensa de la estrategia antiterrorista del Reino Unido, conocida como "Prevent". En un artículo publicado en el Times, el ex primer ministro, de 55 años, arremetió contra las organizaciones musulmanas más importantes que critican el llamado programa de desradicalización. En el artículo, Cameron respaldó un nuevo informe del grupo de expertos Policy Exchange que pide la "deslegitimación" de las voces musulmanas críticas con el gobierno y también recortes de financiación a los grupos musulmanes que hacen campaña para "socavar" el plan, aunque hay que subrayar que ninguno de los grupos mencionados recibe dinero de los contribuyentes.
La intervención de Cameron se produce cuando el gobierno tory británico está a punto de dar a conocer los detalles de la revisión de la estrategia "Prevent" tras el asesinato del diputado conservador Sir David Amess. Ali Harbi Ali, declarado culpable del asesinato, había sido remitido a "Prevent" siete años antes. No es el único que, a pesar de pasar por el plan de desradicalización del gobierno, llegó a cometer horribles actos de terrorismo.
El momento del artículo de Cameron y su enfoque exclusivo en los musulmanes sugiere que su ataque en el Times es un precursor de probables reformas que impulsarán aún más la "Prevención" hacia una dirección más antimusulmana. Algunos en la derecha de la política no están contentos con el hecho de que "Prevent" se haya preocupado más por los neonazis y los supremacistas blancos en lugar de por los musulmanes. El propio Cameron admite que "En 2020-21, el 46% de las remisiones al programa de desradicalización del Canal "Prevent" estaban relacionadas con el extremismo de extrema derecha y sólo el 22% con el extremismo islamista." Con los tories moviéndose más a la derecha, ¿estamos a punto de ver una revisión de "Prevent", que inclinará la balanza para asegurarse de que el enfoque vuelve a los musulmanes aunque la amenaza del terrorismo de la extrema derecha es una preocupación mayor?
Aunque sólo podemos especular sobre la dirección de "Prevent", hay pocas dudas sobre el hecho de que la pieza de Cameron legitima aún más los tropos islamófobos que ahora están peligrosamente omnipresentes en nuestra sociedad. La afirmación infundada del ex primer ministro de que los grupos musulmanes que critican "Prevent" están "permitiendo el terrorismo" es un indicio tan claro como cualquier otro de que su enérgica defensa del programa de desradicalización pretende alimentar el pánico moral hacia los musulmanes.
Shawcross, que también fue anteriormente miembro de la junta directiva de la sociedad antimusulmana Henry Jackson (HJS), es conocido por sus comentarios despectivos sobre el islam en la sociedad británica y en Europa en su conjunto. Ya en 2012 declaró que "Europa y el islam es uno de los mayores y más aterradores problemas de nuestro futuro. Creo que todos los países europeos tienen poblaciones islámicas que crecen muy rápidamente".
No es de extrañar que la decisión de Cameron de ignorar estas preocupaciones y señalar a los críticos musulmanes como "facilitadores del terrorismo", al tiempo que respalda la agenda antimusulmana de un grupo de expertos de derechas, al que BBC Newsnight acusó de fabricar pruebas sobre mezquitas que difunden literatura extremista, haya sido recibida con una fuerte condena.
"Es muy revelador que en su intento de defender "Prevent", Policy Exchange haya ignorado por completo el amplio conjunto de críticas procedentes de fuera de la comunidad musulmana. Esto subraya su agenda abiertamente islamofóbica", dijo Muhammad Rabbani, Director General de CAGE, uno de los grupos mencionados en el informe de Policy Exchange. "Es indicativo de la islamofobia en el Reino Unido el hecho de que antiguos primeros ministros den su nombre a una hostilidad tan abierta hacia la sociedad civil musulmana".
La Dra. Layla Aitlhadj, directora de Prevent Watch y copresidenta de la People's Review of Prevent, dijo: "El informe de Policy Exchange ofrece poco en términos de investigación o crítica académica, pero presenta una serie de ataques a las organizaciones de la sociedad civil musulmana y a los individuos que son críticos con el tóxico programa "Prevent" del gobierno y su impacto en los musulmanes y en la sociedad en general".
Un portavoz del Consejo Musulmán de Gran Bretaña (MCB) -también señalado por Cameron- dijo que Policy Exchange ha liderado sistemáticamente los esfuerzos para desalentar la cooperación entre las autoridades y el Consejo Musulmán de Gran Bretaña. El think tank de derechas recomendó al gobierno británico en 2007 que cortara los lazos con el MCB, tras una investigación que, como se ha mencionado, se descubrió que había fabricado pruebas, según Newsnight de la BBC. "Por lo tanto, es irrisorio que el Policy Exchange afirme ahora que somos nosotros los que desaconsejamos la cooperación porque ejercemos nuestra responsabilidad democrática de examinar la mala política", dijo el portavoz del MCB. "El MCB siempre se ha opuesto repetidamente y en voz alta a todas las formas de terrorismo, pero la amnesia del Policy Exchange no lo reconoce".
Las afirmaciones infundadas de Cameron en el Times y su respaldo al informe del Policy Exchange son una muestra más de que un número preocupantemente alto de personas dentro del establishment británico creen que la honestidad, el rigor académico y los principios básicos de la libertad de expresión pueden dejarse de lado cuando se trata de demonizar a los musulmanes.
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