El filántropo turco Osman Kavala, que fue condenado a cadena perpetua por intentar derrocar al Gobierno financiando protestas en 2013, dijo el miércoles que la sentencia violaba las normas legales y reflejaba la presión política sobre el tribunal, informa Reuters.
Un tribunal de Estambul condenó a Kavala la semana pasada, en un caso que el máximo tribunal europeo y las potencias occidentales dicen que está motivado políticamente.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) y los aliados occidentales de Ankara, incluido Washington, han pedido que se ponga fin a la detención de Kavala.
"La decisión es arbitraria y se ha tomado violando las normas legales bajo presión política", dijo Kavala en un comunicado.
Países como Estados Unidos, Francia y Alemania consideran que la sentencia es un intento del gobierno del presidente Tayyip Erdogan de silenciar a los opositores.
El ministro de Asuntos Exteriores, Mevlut Cavusoglu, dijo a los periodistas el martes que Occidente se había centrado en la sentencia debido a su financiación y "uso" del activista de derechos humanos.
"Ankara comprende las reacciones a la condena de Kavala. La persona que han financiado y utilizado ha ido a la cárcel", dijo Cavusoglu.
Dos días después del veredicto, Erdogan llamó a Kavala el George Soros de Turquía, en referencia al multimillonario filántropo estadounidense, y al coordinador de las protestas de Gezi de 2013.
Kavala niega estar detrás de las protestas y ser financiado por Soros. Las protestas empezaron como pequeñas manifestaciones en un parque de Estambul y se convirtieron en una bola de nieve de disturbios antigubernamentales a nivel nacional.
"Se ha intentado justificar la decisión judicial con declaraciones en las que se afirma que estoy apoyado por Soros. Es un simple hecho que yo no organicé las protestas de Gezi", dijo Kavala en su declaración.
"Es inútil vincular a Soros o a cualquier otro actor externo con el hecho de que cientos de miles de nuestros conciudadanos salieron a la calle contra las prácticas antidemocráticas con un sentido de justicia, exigiendo libertad", dijo.
"El juicio de Gezi desveló el estado del poder judicial, exponiendo aún más el gran peligro que supone para los conciudadanos la manipulación del poder judicial en estos términos", dijo Kavala.