El gobierno yemení exigió ayer a Estados Unidos que presione al grupo hutí para que levante el asedio impuesto a la ciudad de Taiz, informó la agencia de noticias Anadolu.
Esto se produjo durante una reunión entre el ministro de Asuntos Exteriores yemení, Ahmed Awad Bin Mubarak, con el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, en Washington, DC, según un comunicado emitido por el gobierno yemení.
El comunicado dice que en la reunión "se discutieron las formas de fortalecer y desarrollar las relaciones bilaterales entre los dos países amigos, así como los acontecimientos en Yemen y el proceso de paz en Yemen".
"Mientras que el gobierno estaba dispuesto a hacer todo lo posible para que la tregua fuera un éxito y aplicar sus compromisos, que han culminado recientemente con el restablecimiento de los vuelos desde y hacia el aeropuerto de Sanaa, las milicias hutíes siguen postergando el cumplimiento de sus compromisos, especialmente los relacionados con el levantamiento del asedio impuesto a la ciudad de Taiz, la facilitación de la circulación de los ciudadanos y el alivio de la crisis humanitaria en la gobernación asediada desde hace más de 7 años", cita el comunicado a Bin Mubarak.
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El ministro pidió a Estados Unidos y a la comunidad internacional que "cumplan con su deber hacia los civiles asediados en la ciudad de Taiz y que presionen a las milicias hutíes para que abran los pasos de la ciudad."
Bin Mubarak subrayó que, aunque la tregua puso fin a las hostilidades y alivió el sufrimiento de la población, la falta de seriedad de los hutíes a la hora de adherirse a ella y sus continuas violaciones ponen a prueba a la ONU y a la comunidad internacional.
Los hutíes no hicieron ningún comentario inmediato sobre las declaraciones de Bin Mubarak.
El 1 de abril, el enviado de la ONU a Yemen, Hans Grundberg, anunció que las partes en conflicto habían acordado una tregua "prorrogable" de dos meses, que comenzó al día siguiente. La coalición árabe liderada por Arabia Saudí, las fuerzas progubernamentales y los hutíes acogieron con satisfacción la tregua.
La disposición más destacada de la tregua es el restablecimiento de los vuelos comerciales a través del aeropuerto de Sanaa y la apertura de carreteras en la ciudad de Taiz.