Suecia intentará avanzar de forma constructiva en las conversaciones con Turquía sobre las objeciones de Ankara respecto a la solicitud del país nórdico de ingresar en la alianza defensiva de la OTAN, según ha declarado hoy la ministra de Asuntos Exteriores, Ann Linde.
Finlandia y Suecia solicitaron su ingreso en la OTAN el mes pasado en respuesta a la invasión rusa de Ucrania, pero se enfrentan a la oposición de Turquía, que les acusa de apoyar y dar cobijo a militantes kurdos y otros grupos que considera terroristas.
Las objeciones tomaron por sorpresa a los funcionarios finlandeses, suecos y de la OTAN, y han reducido las perspectivas de un rápido progreso en las solicitudes de adhesión antes de la cumbre de la OTAN en Madrid a finales de este mes.
"Nuestra solicitud ha recibido un amplio apoyo entre los miembros de la OTAN", dijo en una declaración de política exterior en el Parlamento sueco. "Nuestra ambición es, con espíritu constructivo, avanzar en las cuestiones que Turquía ha planteado".
Linde añadió que no debe haber dudas de que Suecia está junto a sus aliados contra el terrorismo.
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El gobierno sueco sobrevivió el martes a una moción de censura con la ayuda de un legislador cuyas demandas de apoyo a los kurdos en el norte de Siria podrían complicar sus intentos de ingresar en la OTAN, todos cuyos miembros deben aprobar cualquier nuevo ingreso.
Ankara también ha arremetido contra las autoridades suecas por detener las exportaciones de armas a Turquía en 2019 cuando el país lanzó una operación militar en el norte de Siria.
Aunque no se refirió directamente a Turkiye, Linde dijo que el ingreso de Suecia en la OTAN podría "cambiar las condiciones de las exportaciones de armas dentro de nuestro marco regulatorio nacional".