Las autoridades de ocupación israelíes han vuelto a impedir el suministro de agua potable en la mezquita de Ibrahimi, en la ciudad ocupada de Cisjordania, Hebrón, según informó el domingo un funcionario palestino.
Según el director de la mezquita, Ghassan Al-Rajabi, es el cuarto día consecutivo que Israel impide el suministro de agua potable.
Al-Rajabi dijo que la medida de las autoridades de ocupación israelíes era un intento de restringir el número de fieles y de presionar a los palestinos que permanecían dentro de la mezquita para que se marcharan. Los colonos judíos ilegales, por su parte, están protegidos por las fuerzas de seguridad de la ocupación cada vez que deciden irrumpir en el lugar sagrado.
Añadió que Israel pretende, con estas medidas, imponer su pleno control sobre la mezquita, pero subrayó que los palestinos seguirán resistiendo y defendiendo su tierra y sus santuarios religiosos para socavar el programa de judaización sistemática del Estado de ocupación.
En 1994, un colono judío de Estados Unidos utilizó su rifle del ejército israelí para matar a 29 fieles musulmanes y herir a más de 100 mientras participaban en la oración del amanecer en la mezquita de Ibrahimi. Los supervivientes dominaron a Baruch Goldstein y lo mataron. Su tumba se convirtió en un santuario para los colonos judíos de la Hebrón ocupada y sus alrededores.
Mientras tanto, en la Jerusalén ocupada, los colonos judíos ilegales han continuado sus incursiones en la mezquita de Al-Aqsa bajo la plena protección de las fuerzas de ocupación israelíes. Testigos presenciales afirmaron que al menos 120 colonos judíos irrumpieron el domingo en la mezquita y realizaron rituales talmúdicos en el santuario.
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