La reputación de los Emiratos Árabes (EAU) como centro de flujos ilícitos de dinero ha despertado la alarma en Estados Unidos, ya que los funcionarios de Washington expresan su preocupación por que el Estado del Golfo se convierta en un refugio para el dinero corrupto ruso, lo que, según ellos, socavará las sanciones a Rusia.
Se ha pedido a las instituciones financieras de los EAU que permanezcan vigilantes para combatir la evasión de las sanciones rusas. Los Estados occidentales temen que su aliado del Golfo, y otros como Turquía, se conviertan en refugios de dinero ilícito vinculado al Kremlin.
"Las instituciones financieras deben ser extremadamente cautelosas en el manejo de cualquier negocio relacionado con Rusia y en la gestión de los riesgos asociados a las instituciones financieras que tienen exposición al sistema financiero ruso", se dice en el Financial Times que dijo el subsecretario del Tesoro estadounidense, Wally Adeyemo, al tiempo que advirtió sobre el lavado de dinero ruso.
"Sabemos que los bancos rusos han empleado prácticas de pago engañosas y han utilizado empresas ficticias y otros medios para ocultar la verdadera naturaleza de sus transacciones", dijo Adeyemo según una copia de su discurso preparado para una mesa redonda bancaria de los Emiratos Árabes Unidos publicada ayer.
Los funcionarios occidentales habrían reconocido el rigor de los bancos emiratíes a la hora de gestionar la afluencia de decenas de miles de rusos al centro comercial del Golfo desde la invasión de Ucrania por parte de Moscú en febrero, pero también son conscientes de que los prestamistas mundiales con sede en los EAU han sido multados anteriormente por transacciones con el vecino Irán, que lleva años sometido a sanciones.
Adeyemo, que llegó a los EAU a principios de esta semana, advirtió que una diligencia debida insuficiente "no es una defensa" y que EE.UU. podría apuntar a ciudadanos no estadounidenses por proporcionar "apoyo material" a una entidad sancionada.
El informe del FT menciona que los diplomáticos están preocupados por la presencia visible de yates y jets privados pertenecientes a rusos sancionados en los EAU, temiendo que uno de sus socios de seguridad regional más cercanos pueda socavar los intentos de EE.UU. y Europa de limitar al presidente Vladimir Putin.
La reputación de los EAU en materia de blanqueo de dinero fue planteada hace tres años por el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI). El grupo, con sede en París, afirmó que Abu Dhabi no está haciendo lo suficiente para frenar el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo.
Un año más tarde, Abu Dhabi tomó medidas para abordar su pésimo historial en materia de proliferación de dinero negro mediante dos memorandos de entendimiento con Bangladesh y Somalia, un año después de que el organismo de control mundial amenazara con situar al país junto a países como Yemen por tener "deficiencias estratégicas".