Se prevé que millones de yemeníes más corran el riesgo de morir de hambre este año, después de que el Programa Mundial de Alimentos (PMA) anunciara nuevos recortes en su ayuda alimentaria en Yemen.
El PMA hizo el anuncio en un mensaje de Twitter ayer, afirmando que "los críticos déficits de financiación, la inflación mundial y las repercusiones de la guerra en Ucrania han obligado al PMA en Yemen a tomar algunas decisiones extremadamente difíciles sobre el apoyo que proporcionamos a nuestros beneficiarios".
Note to media: critical funding gaps, global inflation and the knock-on effects of the war in #Ukraine have forced @WFP in #Yemen to make some extremely tough decisions about the support we provide to our beneficiaries. #Yemencantwait
— WFP Yemen (@WFPYemen) June 26, 2022
La organización, dependiente de la ONU, proporciona actualmente ayuda alimentaria a 13 millones de personas en Yemen. Los nuevos recortes, sin embargo, limitan aún más esa capacidad al permitirle ahora proporcionar a cinco millones de ellos sólo el 50% de sus necesidades alimentarias diarias, mientras que los ocho millones restantes sólo reciben el 25% de sus necesidades.
No sólo se restringirá la ayuda alimentaria, sino también las "actividades de resiliencia y medios de subsistencia, y los programas de alimentación y nutrición escolar", que se recortarán para cuatro millones de personas, con lo que sólo 1,8 millones podrán acceder a ellos.
Estas raciones llegan medio año después de que el PMA se viera obligado a realizar recortes en la ayuda alimentaria a Yemen a finales de 2021 -antes de la invasión rusa de Ucrania- por falta de fondos suficientes. En la actualidad, hay al menos 17,4 millones de yemeníes -más de la mitad de la población del país- que necesitan ayuda alimentaria.
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Debido a los recortes, al conflicto en curso en Yemen y a la continua falta de acceso suficiente a los puertos del país, se prevé que el número de yemeníes que necesitan asistencia alimentaria aumente a unos 19 millones de personas a finales de este año. De esa cantidad, 7,3 millones se enfrentarán a niveles de hambre de emergencia.
Los recortes también se producen en medio de la escasez mundial de suministros de trigo, causada por la pandemia de Covid-19, los cierres mundiales y ahora la invasión rusa de Ucrania.
Esta escasez va a agravar la crisis humanitaria en Yemen, ya que el ministro de Planificación del gobierno yemení, respaldado por Arabia Saudí y reconocido internacionalmente, advirtió el viernes que las reservas de trigo del país podrían acabarse a mediados de julio, a sólo unas semanas de distancia.
El ministro instó a los Estados miembros de la Unión Europea a ayudar a Yemen a conseguir nuevos mercados y proveedores para sustituir la falta de trigo de Ucrania y Rusia, que juntos producen y exportan alrededor del 30% del suministro total de trigo del mundo.