Los Emiratos Árabes Unidos han rechazado la propuesta presentada por el Secretario General de la ONU, António Guterres, de nombrar al ex ministro de Asuntos Exteriores de Argelia, Sabri Boukadoum, como enviado de la ONU a Libia. El rechazo fue expresado en una sesión del Consejo de Seguridad de la ONU.
Según la Agencia France-Presse (AFP), una fuente diplomática dijo que varios países, especialmente Francia y Ghana, subrayaron durante la sesión del lunes por la noche que el puesto debe ser ocupado "lo antes posible". Está vacante desde el pasado mes de noviembre.
El Consejo de Seguridad sólo ha prorrogado el mandato de la Misión de Apoyo de la ONU en Libia (UNSMIL) por períodos cortos desde finales del año pasado. Cada uno de ellos sólo ha durado unos meses debido al fracaso de la misión, provocado especialmente por el desacuerdo del Consejo sobre el nuevo enviado. El mandato actual de la UNSMIL termina el 31 de julio.
Guterres propuso la semana pasada a los quince miembros del Consejo de Seguridad el nombramiento del diplomático Boukadoum -ex representante de su país en la ONU en Nueva York- como enviado a Libia. Un diplomático dijo a la AFP que sólo los EAU rechazaron la propuesta. Los EAU son un miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, y actualmente representan al Grupo Árabe en él.
Según otros diplomáticos, los EAU afirmaron durante la sesión que "los países árabes y las partes libias expresaron su oposición" al nombramiento de Boukadoum como enviado a Libia. Las fuentes no especificaron los Estados o partidos en cuestión. Una de ellas se limitó a señalar que existía una "preocupación regional" por su nombramiento, especialmente porque Argelia tiene frontera con Libia. Si se nombra a Boukadoum, se afirma que tendrá una "tarea imposible".
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Ningún gobierno estatal ni, de hecho, ningún partido en Libia se ha opuesto oficialmente desde que se reveló que se estaba considerando a Boukadoum para el papel de enviado.
Estados Unidos se opuso al nombramiento del diplomático Ramtane Lamamra como enviado de la ONU a Libia antes de confiar la tarea al ex ministro de Asuntos Exteriores eslovaco Ján Kubiš. Éste dimitió en noviembre de 2021 y le sucedió la estadounidense Stephanie Williams, que dejará su cargo el 30 de junio.
No es ningún secreto que los EAU están adoptando una política hostil contra Argelia, y ofrecen un apoyo explícito a la ocupación marroquí del Sáhara Occidental, a la que Argelia se opone. El gobierno de Argelia ha criticado el papel de los EAU en el territorio en disputa, sobre todo la apertura de un consulado en El Aaiún, a pesar de que no hay ciudadanos de los EAU en el Sáhara Occidental.
Argelia también ha criticado la normalización de las relaciones de los EAU con el Estado ocupante de Israel. "Argelia rechaza la normalización y no bendice las prisas por ella", dijo el presidente Abdelmadjid Tebboune.
Por su parte, el representante permanente adjunto de Rusia ante la ONU, Dmitry Polyanskiy, ha criticado a los países occidentales que, según él, pretenden seguir controlando el expediente libio.
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