El jefe del grupo militante kurdo Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) ha pedido a Rusia e Irán que ayuden a impedir que Turquía lance una ofensiva militar contra sus posiciones en el norte de Siria, mientras sigue planeando la amenaza de una nueva operación turca.
Según la agencia de noticias AFP, el comandante en jefe de las FDS, Mazloum Abdi, instó esta semana a la participación de Moscú y Teherán contra los objetivos de Ankara en la región, acusando a la coalición global liderada por Estados Unidos para derrotar a Daesh -también conocida como Operación Inherent Resolve- de adoptar una posición "débil" que es "insuficiente para acabar con las amenazas."
En mayo, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, anunció sus planes de lanzar una nueva operación militar en las zonas controladas por las milicias kurdas, que sería la cuarta ofensiva de este tipo de Turquía en el norte de Siria. La operación pretende despejar la "zona segura" de 30 kilómetros de profundidad en el norte de Siria de los elementos militantes kurdos restantes, con el fin de asentar allí al menos un millón de refugiados sirios.
LEER: La "OTAN de Oriente Medio" podría hacerse pública o posponerse
Abdi también reiteró que, tras negociar con Rusia, las fuerzas militantes kurdas permitieron al régimen sirio de Bashar al-Assad reforzar sus tropas en las zonas controladas por los kurdos, especialmente en ciudades como Kobane y Manbij, en el norte del país. La amenaza de una nueva ofensiva turca ha obligado aparentemente a las Fuerzas de Autodefensa a reforzar los lazos con Assad, Rusia y, ahora, con las fuerzas iraníes, en un esfuerzo por repeler la operación planeada por Ankara.
El llamamiento de Abdi a la ayuda rusa e iraní es probablemente más diplomático que militar, ya que se produce sólo unos días antes de una cumbre que se celebrará en Irán a partir del martes, en la que el presidente iraní Ebrahim Raisi recibirá a Erdogan y a su homólogo ruso Vladimir Putin en una serie de negociaciones renovadas sobre Siria y el conflicto que dura ya 11 años.
Si Moscú y Teherán atienden a la llamada de las Fuerzas de Autodefensa, es de esperar que intenten disuadir a Ankara de su planeada operación militar.