Rusia responsabiliza a Israel de la última ofensiva militar de tres días contra los palestinos en la Franja de Gaza, según ha anunciado el Ministerio de Asuntos Exteriores en Moscú.
"La nueva escalada fue causada por los disparos del ejército israelí en la Franja de Gaza el 5 de agosto", dijo la portavoz del ministerio, Maria Zakharova. Señaló que las facciones palestinas respondieron a esta escalada con el lanzamiento indiscriminado de cohetes hacia el territorio israelí.
"Observamos con profunda preocupación la evolución de los acontecimientos", añadió Zakharova. "La reanudación de un enfrentamiento militar a gran escala [vería deteriorarse aún más] la ya deplorable situación humanitaria en Gaza".
La funcionaria del ministerio reafirmó la "posición de principio y coherente de Rusia, reflejada en las resoluciones pertinentes de la Asamblea General de la ONU y del Consejo de Seguridad, en apoyo de una solución global y a largo plazo del conflicto palestino-israelí de acuerdo con el principio de los dos Estados".
"Sólo es posible poner fin a la violencia cíclica en el marco del proceso de negociación, cuyo resultado debe ser la realización de los legítimos derechos nacionales del pueblo palestino a establecer un Estado independiente dentro de las fronteras de 1967".
Las declaraciones de Zakharova se producen en un momento en que las relaciones entre Israel y Rusia son tensas.
Mientras tanto, el embajador ucraniano en Israel, Yevgeny Kornichuk, declaró su solidaridad con el Estado de ocupación: "Como ucraniano cuyo país está siendo atacado brutalmente por su vecino, siento una gran simpatía por la población israelí. Un ataque contra niños y mujeres es algo abominable. El terror y el ataque malintencionado contra civiles son la realidad diaria de israelíes y ucranianos, y hay que poner fin inmediatamente a esta espantosa amenaza".
Kornichuk hizo sus comentarios antes de que entrara en vigor el alto el fuego entre Gaza e Israel mediado por Egipto.
Aunque el Estado ocupante declaró que su objetivo era el movimiento palestino de la Yihad Islámica, el Ministerio de Sanidad palestino ha confirmado que 44 ciudadanos murieron como consecuencia de la ofensiva israelí, entre ellos 15 niños y cuatro mujeres. Otros 360 civiles palestinos resultaron heridos. Además, muchas casas y edificios residenciales fueron destruidos.
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