Etiopía declaró el jueves que no se llevaría a cabo ningún esfuerzo "paralelo" para las conversaciones con los rebeldes de Tigray, aparte de la mediación de la Unión Africana con el ex presidente nigeriano Olusegun Obasanjo como facilitador, informa la Agencia Anadolu.
En una rueda de prensa semanal, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Meles Alem, reiteró la postura de Etiopía de entablar conversaciones con los rebeldes de Tigray sin ninguna condición previa.
Un informe que circuló ampliamente en las redes sociales la semana pasada sugería que la Comisión de la Unión Africana había recomendado la inclusión de la ONU, Estados Unidos y la UE en la mediación.
Ese documento, supuestamente emitido por la Comisión de Asuntos Políticos, Paz y Seguridad de la Comisión de la Unión Africana, "es un documento falso", dijo el portavoz.
Sin embargo, dijo que la Comisión de la Unión Africana puede, si es necesario, contratar a africanos de renombre para que apoyen a Obasanjo en sus esfuerzos.
El Frente de Liberación del Pueblo de Tigray (TPLF) planteó una serie de exigencias como condición previa a las conversaciones, entre ellas el restablecimiento inmediato de los servicios eléctricos, de telecomunicaciones y bancarios.
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Sin embargo, Meles reiteró su disposición a proporcionar a Tigray, una región de unos seis millones de habitantes, esos servicios básicos mediante consultas.
El 2 de agosto, los enviados especiales de Estados Unidos y la UE para el Cuerno de África, Mike Hammer y Annette Weber, estuvieron en Mekele, capital de la región de Tigray, como parte de su visita de una semana a Etiopía, cuyo objetivo es "fomentar el inicio de conversaciones" entre el gobierno etíope y el TPLF bajo los auspicios de la Unión Africana.
"El diálogo político es necesario para resolver el conflicto en el norte de Etiopía y lograr una paz duradera", afirmaron los enviados en un comunicado de prensa emitido tras su viaje a Mekele, en el que se congratulaban del compromiso público de ambas partes de entablar conversaciones.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha sido uno de los más críticos con el gobierno etíope en su relación con los rebeldes de Tigray.
El miércoles, tuiteó que ¿en qué otro lugar del mundo un gobierno niega a 6 millones de personas el acceso a su dinero mediante el cierre de bancos durante 20 meses?
El TPLF gobernó Etiopía durante 27 años al frente de una coalición cuatripartita hasta su desaparición en 2018 gracias a años de protestas populares contra una oligarquía profundamente corrupta, el mal gobierno y las violaciones de los derechos humanos.