El ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Nasser Bourita, afirmó que la opinión adoptada por un grupo de países europeos y otros de que la iniciativa de autonomía es la base para una solución de la cuestión de la región del Sáhara no contradice los esfuerzos internacionales.
Esto se produjo en una conferencia de prensa con su homóloga alemana, Annalina Baerbock, ayer al margen de su visita de dos días a Marruecos, dijo Bourita: "Cuando un grupo de países europeos y otros países apoyan y consideran la iniciativa de autonomía como base para resolver la cuestión del Sáhara, no contradice los esfuerzos de las Naciones Unidas y las resoluciones del Consejo de Seguridad, sino que los refuerza y empuja hacia esta solución".
En cuanto a la declaración del Alto Representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad de la Unión Europea, Josep Borrell, de que es necesario "consultar" con los saharauis, Bourita dijo: "Hubo una especie de arrepentimiento por esta declaración porque no reflejaba la posición española ni la posición europea sobre la cuestión del Sáhara".
Borrell había señalado que "la posición del gobierno español era y sigue siendo la posición de la Unión Europea. Es decir, defender la celebración de consultas para que sea el pueblo saharaui el que decida cómo quiere que sea su futuro".
Rabat propone ampliar la autonomía de la región del Sáhara bajo su soberanía, mientras que el Frente Polisario pide la celebración de un referéndum de autodeterminación, propuesta que apoya Argelia, que acoge a los refugiados de la región.
En marzo, España cambió su postura respecto al Sáhara Occidental y anunció su apoyo a la iniciativa marroquí sobre esta región.
En el mensaje, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dijo que la iniciativa marroquí de autonomía para el Sáhara Occidental es "la solución más seria, realista y creíble" para el largo contencioso.
Esto llevó a la vecina Argelia a poner fin a su tratado de cooperación de 20 años con España.