Los intentos de Israel de detener el programa nuclear iraní mediante sabotajes, asesinatos y amenazas no tendrán éxito, declaró ayer el presidente Ebrahim Raisi en una conferencia de prensa.
El presidente añadió que las "capacidades nucleares pacíficas" son un derecho fundamental de los iraníes, y añadió que "nadie" puede impedir que Irán las adquiera.
Esto se produce mientras el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Nasser Kanaani, dijo que los asuntos pendientes en las negociaciones nucleares "no son muchos", pero son "sensibles, importantes y decisivos".
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Explicó que no hay una fecha concreta fijada para que Irán responda a los comentarios estadounidenses sobre la propuesta "definitiva" presentada por la Unión Europea para reactivar el acuerdo nuclear.
"Tan pronto como Teherán termine de estudiar los detalles y llegue a una conclusión, enviará su respuesta", añadió.
En una entrevista concedida a la agencia oficial de noticias iraní IRNA, Kanaani describió el curso de las negociaciones nucleares como "positivo y avanzando", señalando que "las cuestiones relacionadas con el acuerdo nuclear se han resuelto entre las partes iraní y estadounidense."
Subrayó que Teherán se toma "en serio" las negociaciones, "pero hay que ver si la administración estadounidense tiene también la voluntad política necesaria" y si seguirá esperando las posiciones de Israel y poniendo como base de su decisión política las prioridades de Tel Aviv o el interés nacional estadounidense.
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