Si la esposa del preso palestino en huelga de hambre Khalil Awawdeh no hubiera hecho públicas las fotos del cuerpo demacrado de su marido, la UE no habría sentido la necesidad de pedir su liberación. "Conmocionado por la horrible imagen de Awawdeh, que lleva ya 169 días en huelga de hambre en protesta por su detención sin cargos y corre peligro inminente de morir", tuiteó la Delegación de la UE para los palestinos. "Si no se le acusa inmediatamente, tiene que ser liberado". Qué buena suerte que se hayan facilitado fotos para que la UE asuma una postura activista durante unos segundos en las redes sociales, mientras pasa por alto por completo que las huelgas de hambre palestinas son una respuesta a la violencia colonial y a la impunidad de Israel.
Hay 670 palestinos como Awawdeh retenidos por Israel bajo detención administrativa, sin cargos ni juicio. Awawdeh fue detenido por ser sospechoso de pertenecer al movimiento de la Yihad Islámica Palestina y sometido a detención administrativa por motivos de seguridad de Israel en diciembre de 2021.
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El caso de Awawdeh no es único, y no será el último. Las prácticas de detención administrativa de Israel son contrarias al derecho internacional de los derechos humanos y al derecho internacional humanitario. Esto es lo que debería haber sido el centro de la preocupación de la UE mucho antes de que Awawdeh se embarcara en su huelga de hambre, y mucho menos cuando corre el riesgo de morir a causa de su protesta. La criminalización de la resistencia palestina por parte de Israel ha convertido la detención administrativa en la norma y no en la excepción, por lo que la UE debería haber asumido una responsabilidad mucho mayor que un único tuit acompañado de la fotografía de Awawdeh para adornar sus palabras.
La UE debe recordar que permite que las violaciones de Israel continúen sin ninguna repercusión por su violencia colonial. Tuitear sobre el estado actual de Awawdeh no sitúa a la UE en una posición favorable cuando ha ignorado la violencia inherente a la detención administrativa hasta que una huelguista de hambre palestina se convierte en noticia. Las declaraciones oportunistas que emite son inútiles, como la UE sabe muy bien. Peor aún, también sabe que esas declaraciones no ejercen ninguna presión sobre Israel para que ponga fin a la detención administrativa, y que una vez que los medios de comunicación desvíen la atención hacia otros asuntos palestinos en lugar de hacia Awawdeh, se producirá el silencio sobre la detención administrativa y la difícil situación de Awawdeh. Después de todo, si la comunidad internacional ha normalizado las prácticas de detención administrativa de Israel hasta el punto de que los palestinos tienen que recurrir a las huelgas de hambre para tomar conciencia temporal y una posible negociación de mejores condiciones de supervivencia, ¿por qué debería la UE hacer algo más que publicar un único tuit?
¿Necesitan los diplomáticos de la UE ver pruebas visuales de los cuerpos debilitados de los huelguistas de hambre para hacer declaraciones? ¿Por qué no se pronuncian en contra de la detención administrativa antes de que los presos palestinos adopten esta medida de último recurso? La complicidad de la UE debe ser puesta de manifiesto tanto como la violencia colonial de Israel. Esta última, recordemos, se estructura en torno al apoyo que recibe de la comunidad internacional, incluida la Unión Europea.
En cambio, la UE ha participado en la deshumanización de todos los huelguistas de hambre, no sólo de Awawdeh, creando una sensación a partir de una fotografía y un tweet. Ha habido varios casos en los que Israel ha renunciado a su política de detención administrativa en casos publicitados, que lamentablemente se consideran un triunfo y no un barniz para los crímenes cometidos después. Una liberación debería celebrarse a nivel individual por el alivio que supone, aunque en la mayoría de los casos sea sólo un paréntesis. Sin embargo, la UE -un organismo político cómplice de la violencia de Israel- sabe que una supuesta victoria esconde otras violaciones normalizadas. La huelga de hambre pone de manifiesto una situación difícil, no se olvide, en ausencia de decisiones políticas que tengan el poder de hacer responsable a Israel. Por lo tanto, una protesta por la libertad de los palestinos tiene que ser también una protesta contra la complicidad de la UE y de la comunidad internacional en los crímenes israelíes.
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