El partido Afek Tounes anunció, el jueves, su intención de boicotear las elecciones legislativas anticipadas del 17 de diciembre.
Con ello, Afeq Tounes se convierte en el undécimo partido que anuncia su boicot a las elecciones, después de Ennahda, Corazón de Túnez, Coalición por la Dignidad, Partido del Movimiento, Al Amal, Partido Republicano, Partido del Trabajo, Polo Democrático Modernista, Corriente Democrática y Foro Democrático por el Trabajo y las Libertades.
En un comunicado, el partido Afeq Tounes pide al presidente Kais Saied que convoque elecciones presidenciales anticipadas, basadas en la nueva Constitución.
Sostiene que Saied "perdió su legitimidad política y legal tras la abolición de la constitución de 2014, según la cual fue elegido."
Una nueva constitución para el país fue aprobada tras un referéndum popular el 25 de julio, como parte de las medidas excepcionales que Saied impuso un año antes de esa fecha y que provocaron una fuerte división entre los tunecinos.
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El partido Afeq Tounes llamó "al pueblo tunecino, con todos sus componentes políticos y civiles, a resistir el autoritarismo político y la desviación hacia el régimen autocrático".
Afeq Tounes es uno de los partidos que rechazó los resultados del referéndum sobre la nueva Constitución y presentó un recurso ante el Tribunal Administrativo tras decidir votar "no" a la Constitución.
El 15 de septiembre, Saied emitió una orden en la que llamaba a los ciudadanos a participar en las elecciones legislativas de diciembre. También ordenó una modificación de la ley electoral para dividir las circunscripciones.
Las medidas excepcionales que Saied impuso fueron: la destitución del gobierno, la disolución del Consejo Judicial Supremo y del Parlamento, la promulgación de leyes mediante decretos presidenciales y la fijación de una fecha anticipada para las elecciones legislativas.
Las fuerzas políticas tunecinas consideran estas medidas como un "golpe de Estado contra la Constitución de 2014 y una consolidación de una autocracia absoluta".
Saied, que inició un mandato presidencial de cinco años en 2019, había dicho en más de una ocasión que sus medidas eran "legales y necesarias" para salvar a Túnez del "colapso total."